Adéntrate en la sección de los Codex dedicada a la intrépida raza de los Shalldare. Estos nativos del implacable Planeta Shalldare poseen una anatomía robusta y adaptaciones excepcionales que los convierten en formidables y temibles guerreros. Con una estructura física diseñada para la eficiencia en la lucha y la supervivencia en su entorno hostil, los Shalldare son una fuerza a tener en cuenta en el universo de Proyect Eternity.
A lo largo de su historia, los Shalldare han mantenido una fuerte conexión con la naturaleza, y este lazo profundo con su tierra natal los ha convertido en guardianes comprometidos de su hogar. Valoran la tierra y celebran rituales en honor a los elementos y sus dioses Gade y Tasár.
La Gloriosa Historia de los Shalldare.
Año: 6772 (ADL)
Hace milenios, en un momento donde la vida era solo una idea lejana, un descomunal fragmento de roca y metal oscuro desgarró el espacio intergaláctico y descendió con fuerza sobre el planeta en cuestión. Los relámpagos y cataclismos sacudieron la superficie del joven mundo mientras los cielos se rasgaron en un estallido de luz y sonido ensordecedor. La piedra cósmica se hundió en las entrañas del suelo, excavando un agujero profundo, mientras que sus fragmentos explotaron en todas direcciones, impregnando cada rincón de su estructura, desde los yermos baldíos hasta los abrasadores desiertos y las áridas llanuras de magma ardiente.
En el resplandor del impacto, el caos y la destrucción se apoderaron del planeta, dejando a su paso un vasto territorio baldío y estéril. Sin embargo, con el paso de millones de años, la vida comenzó a brotar en medio de la tierra arrasada por el desastre cósmico. El corazón del planeta latía con fuerza, bombeando vitalidad y energía a través de su cuerpo, despertándolo de un largo y eterno letargo. La vida, finalmente, había llegado a ese mundo.
En un principio, arribaron las fuerzas primigenias de la naturaleza, personificadas en los Antiguos, seres de entidad inmensa cuyos poderes eran incalculables gracias a su temprana aparición en el universo. Con el transcurso de los milenios, estas entidades crecieron hasta alcanzar tamaños colosales, superando los 20 metros de altura y abarcando vastas extensiones de terreno con su sola presencia. Enfrentándose unas a otras por la dominación en su propia especie, libraron batallas épicas y cruentas durante incontables décadas, arrasando con la superficie del planeta y dando origen a una geografía única y diversa. La huella de sus conflictos quedó marcada en la naturaleza del mundo, moldeando montañas majestuosas, cañones escarpados, cuevas subterráneas, riscos imponentes y mares turbulentos.
Cuando nuestros ancestros llegaron a este mundo fueron emboscados por los antiguos colosos, pero nuestros ancestros no eran para nada unos cobardes, eran la valentía encarnada y a pesar de no ser tan fuertes como los antiguos, tarde o temprano descubrieron la temida arte de las armas.
Golpearon los metales hasta que estos mismos tuvieron la longitud y fueron lo suficientemente filosos como para romper los huesos, cortar la carne y hacer brotar la sangre.
Así fue como reclamamos un lugar en este mundo, nacimos llenos de vida y rebosantes de alto vigor, forjamos un hacha y una armadura, y llevamos la espada del juzgado a los Antiguos, cazándolos hasta que ya no quedó ni uno solo.
Tras su extinción reclamamos nuestro dominio de la vida como herederos y por derecho de dominancia, así fue como llegó la Era del Nuevo reinado de Shalldare que perdurará por siempre.
Finalmente, sembramos tierras fértiles y construimos granjas enormes, criamos animales de distintos tipos y erigimos pueblos inmensos por todo lugar, creamos pinturas, esculturas, monumentos y pulimos el arte de la guerra descubriendo nuestros dones.
Y en el centro de nuestra ciudad, la ciudad de Sektares, Coronamos al Rey Sin Morr, que yacía sentado en el sacro trono de rubíes y piedra negra, revestido en cuero y metales oscuros que hacían resaltar su imponente figura, era de un carácter noble y bondadoso pero siempre que era necesario podía volverse fuerte y frío, por eso lo elegimos para que gobernase, por su capacidad para liderarnos a un camino brillante.
Construimos la hermosa catedral de las lunas gemelas, para venerar y honrar a nuestros dioses y a las doncellas, era una catedral que llegaba hasta las nubes, los vidriales habían sido creados por los mas talentosos entre nosotros y algunos hasta contenían joyas, mientras que la catedral tenía bordes y gran cantidad de detalles y decoraciones de oro por todos lados, paredes blancas y puras como el mármol, ese era nuestro amor hacia ellos.
Nuestros hijos e hijas tendrían la oportunidad de elegir la senda de la espada o la de la cosecha, cuyas existencias honran en igual medida a los dioses y sus doncellas.
Nos regimos por la justicia y la igualdad, tratandonos a todos por igual como hermanos, pero a pesar de todo la guerra jamás se pudo evitar, nuestras casas, monumentos, muros y estandartes cayeron destruidas por tormentas y fuertes desastres, al igual que por las tribus traidoras que habían huido para después regresar mucho más fuertes para atacar nuestros cultivos y pueblos en busca de nuestro sagrado don para la forja y las armas que aguardaba en nuestra sangre fiel.
Nosotros no nos acobardariamos, nuestros ancestros no lo hicieron aún viéndose superados por los antiguos en todo aspecto, y nosotros no deshonrariamos a nuestros dioses trayendo la vergüenza a sus cielos, menos aún cuando ellos nos permitieron vivir en su jardín y poder disfrutar y admirar de sus riquezas.
Así que con ira y brutalidad aplastamos a las hordas herejes y con su sangre fortalecimos nuestra fé más que nunca. Nos alzamos de entre las llamas templados en la lluvia de la victoria, con una voluntad inquebrantable forjada a la más pura vehemencia de la guerra, tras aplastar a todas las tribus herejes del corazón de nuestro pueblo surgieron...
Los guerreros más talentosos y versátiles que Shalldare engendró, a quienes llamamos "Los Emperadores de Sangre" Los más fuertes y los más leales, con una lealtad tan grande que estarían dispuestos a pasar el peor de los castigos antes que traicionar a su madre creadora.
Y durante el tiempo de la guerra, un grupo de guerreros trajeron a nuestro pueblo una tribu completamente desconocida para nosotros, se hicieron llamar los Keerad (Traducido del Shalldare antigüo: Lunares) Llegaron del norte del planeta y a pesar de las grandes diferencias curiosamente llegaron para proponer una alianza con nosotros.
Eran ligeramente distintos a nuestra especie, no poseían cuernos y a diferencia de nuestra piel áspera y dura la suya era suave y blanda, a parte de que cuándo vieron nuestras hachas y espadas sus expresiones fueron "Que barbaridad" ya que para ellos eran cosas sin sentido alguno, y usaban una cosa extraña que llamaban "Tecnología".
Nuestro pueblo se volvió más fuerte tras la aparición de su inteligencia y tecnología, la cuál creó grandes mecanismos y armas para garantizar nuestra prosperidad en las tierras santas, mejoramos nuestras espadas y hachas volviendolas "De energía" y construimos las máquinas que levantaron con pistones nuestro espíritu de batalla al portar armas que consideramos "divinas".
Los Keerad, nuestros nuevos aliados en este universo, nos han otorgado la seguridad de que al morir y ser tomados por la mano de la muerte encontraríamos la paz que tanto buscamos al saber que complacimos a Tásar y Gade con nuestra vida, descansaremos en paz sabiendo que aquellos a quienes apreciamos se unirían con nosotros en el jardín de estrellas en el que los Dioses descansa. Permitiéndonos pasar a su paraíso donde nuestras esposas e hijos podrían unirse a nosotros en el Seku Ka rōôre (Traducido del Shalldare antigüo: Cielo de Guerra)
Con la tecnología y las habilidades de los Keerad, trajeron la claridad y la expansión de nuestra mente, mostrándonos que no solo existen nuestras tierras, sino que existe todo un mundo por explorar allí afuera, pero al aventurarnos descubrimos que al igual que los Keerad habían otras especies, dando inicio a la guerra de las tierras dispares, tomamos la bendición de nuestros dioses y la Tecnología para difundir el nombre de Ergef, el líder supremo de los Keerad.
Descubrimos que no había solo un enemigo, sino muchos. Se descubrieron lugares y pueblos desconocidos para nosotros, y vimos nuestro propio dolor reflejado en sus ojos. Nuestros ejércitos entraron a la batalla y lucharon por la libertad de todos, aún siendo completos desconocidos.
Aunque no luchamos en nuestro suelos, la sangre que derramamos en tierra extranjera fue mucho menor de la que esperábamos. A través de los extraños pueblos que liberamos, se formaron nuevas alianzas y nuestras creencias se difundieron y solidificaron como una sola manteniendo en alto a Tasar y a Gade.
Mientras Ergef atravesaba las estrellas del conocimiento con flotas de guerra llamadas descubrimientos, en un punto de la historia estuvo más cerca que nunca del Rey Sinmorr.
Ergef solicitó al Rey Sinmorr hablar a solas, allí él reveló que había previsto una ruptura en Shalldare. Él le habló de un ritual que debe ser realizado en el más fuerte y puro de nosotros; solo aquel que demostrara ser digno sería probado. La "Marca de Tasar", sería el gran tributo de los Elegidos de las lunas("Akaoikud ka ked keed") que nos ayudaría a limpiar cualquier impureza de nuestras tierras, asegurando nuestra prosperidad continua en este mundo, pero lastimosamente no hubo alguno que fuera lo suficientemente puro como para que Tasar otorgará su Marca... Ni siquiera el mismísimo Shall-Emperador Sinmorr fue digno, el día de la llegada del Protector de Shalldare aún no había llegado.
Ergef, el líder de los Keerad de la tecnología, que a través de la adivinación y profecías, determinaría cuándo el más puro estaría delante de ellos. Los Keerad eran verdad, y solo sus ojos podían encontrar al que estaba destinado a ser el gran liberador de Shalldare a su dolor y caos. La profecía fue escrita, pero a través de los años se desvaneció hasta que solo el líder Keerad susurraba sobre si aquel elegido realmente existía.
Y entonces finalmente El Gran Ergef Olmstead, maestro de la tecnología había fallecido a la vez que su hijo, Dernell Olmstead... Nacía con el mismo talento de su padre, a pesar del dolor que causaba su pérdida, el futuro se veía brillante...
Muchos años después. Los Keerad se reunieron con el Rey Sinmorr, y Dernell le habló de las tierras lejanas en las que con toda certeza, habían encontrado entidades extrañas en el inexplorado sur y de la oportunidad de que llegarán nuevos invasores a Shalldare.
Y sin más dudas llevarían la guerra a las tierras lejanas utilizando los mismos vehículos y armas que la tecnología Keerad había traído.
Tras múltiples combates nos dimos cuenta de que estos enemigos eran verdaderamente resistentes y demasiado fuertes, retiramos a nuestras tropas y cambiamos nuestra estrategia de ataque a defensa.
Y durante una de nuestras reuniones para decidir nuestro siguiente movimiento, a las puertas de la catedral llegaron 2 Guardias que cargaban a un Guerrero, estaba inconsciente y con sangre por todas partes, su ropa desgarrada y su corazón luchaba por vivir.
El Rey Sinmorr no dudó en sanarlo él mismo a pesar de que no fuera de nuestra tierra, su piel era más oscura que la nuestra, era como el asfalto, una vez pudo despertar y comunicarse aprendimos mucho de él, y había algo que a los líderes les intrigaba enormemente, que parecía conocer la auténtica naturaleza de las "máquinas".
Aquel que había llegado desde lugares ignotos y había sobrevivido en primera línea de batalla mucho más que cualquier Shalldare de aquellos que fueron enviados a luchar. Pero este no venía de Las tierras santas obviamente, sino de una parte desconocida para nosotros, pero eso no importó. La pasión que notamos en él al luchar contra la horda era evidente, y su necesidad de la destrucción de los enemigos era igual a la nuestra.
Era alto, de cuernos grandes y fuerte como todos, media 2,38 y sus ojos eran como 2 turmalinas rojas. Su inagotable ira llamó la atención de los más fuertes de la guardia de los Emperadores de sangre, los guerreros Shalldare más fuertes.
Pero como a todo "novato" se le mandó a la arena de combate, pero está vez hubo una intervención directa de los hermanos de los Guerreros de Sangre, la legión de guerreros más fuerte y estricta de todas, nunca en la Historia de la arena alguien había recibido semejante honor de una directa intervención de estos Titanes del combate, pero en esta ocasión, los Guerreros de Sangre rompieron la tradición cultural derribando las puertas de la arena y tomaron al "novato", convencidos de que eli era digno de recibir su entrenamiento.
Varios murmuraron y se burlaron del novato que se sumaba a sus filas, pero en la guerra contra los llamados "tápgied"(traducido del Shalldare antigüo: máquinas) había que aprovechar todas las ventajas disponibles, por minúsculas que fueran, y al ver cómo luchaba con los grandes maestros, descubrieron en él a un implacable e invencible Guerrero.
Aquel hombre era un desconocido, y abandonado a su suerte, y sin embargo, cada vez que era derribado por los grandes líderes volvía a levantarse instantáneamente con más fuerza, y así entrenó y entrenó hasta que dominó las artes Shalldare a la perfección.
Y con el rostro manchado de sangre, se ponía en pie con torva determinación para volver a entrar en combate listo para luchar con sus adversarios.
Pasó el tiempo mientras el extranjero, al cual llamaron: "Akariku" (Traducido del Shalldare antigüo: Elegido) recibía las lecciones de batalla y hermandad que se enseña a todos los Shalldare. Podían percibir cómo se acercaba su momento: pronto, el campo de batalla sentiría su furia y la fuerza que aguardaba en sus puños, y el mundo sentiría su poder...
Satisfechos al comprobar que no sería un desperdicio para las legiones, los Guerreros de Sangre le otorgaron su deseo de llevárselo consigo al otro lado del mundo a luchar contra las crecientes entidades mecánicas.
Allí no conocieron ningún tipo de descanso: lucharon entre la piedra, hierba y el metal y siguieron luchando y luchando bajo las lunas, en medio de la noche mientras sus dioses observaban orgullosos a sus hijos protegiendo sus tierras y dándoles la fuerzas y determinación necesarias para destruir a las hordas enemigas.
Y Akariku sintió cansancio como ningún otro y su cuerpo pesaba más que mil toneladas, las heridas y enfermedades recorrían su cuerpo, pero aún así jamás pidió ayuda, ni se le ofreció la misma, ese es un verdadero Shalldare.
"La esperanza y la hermandad es lo que nos hace fuertes. Es la razón del por qué estamos aquí. Es por lo que peleamos cuando todo lo demás está perdido".
-Akariku a sus hermanos de batalla.
Ocho veces se aventuraron al otro lado y otras tantas regresaron. Y cada una de ellas Akariku volvía más fuerte que antes, al mismo tiempo que sus hermanos de la Legión de la Sangre, siempre teniendo una sed de pelea pero disciplinada y bajo su control, sabía cuando desatarse y cuando comportarse, y a pesar de parecer un animal, siempre respetaba al Rey inclinándose como era debido, y socializaba con sus hermanos.
Al paso de los años y el paso de innumerables batallas contra las máquinas, Akariku llegó a encontrarse entre los guerreros más poderosos de los Shalldare, sus hermanos dejaron de mirarlo con desprecio como a un recluta de sangre indigna.
Para ellos era ahora un compañero forjado en la guerra. Un aliado, Un arma viviente, un hermano...
Sinmorr ocupaba intranquilo el trono mientras se avecinaba un terror proveniente del sur.
La marea del horror nos embistió con fuerza imparable desde el más allá. El enemigo trajo consigo a una enorme legión de docenas de miles de máquinas que aparecieron sin previo aviso, no sabemos cómo pero lograron traer a tal Ejército pasando totalmente desapercibidos. Pero sí sabíamos que arrasaban con todo lo que encontraban a su paso.
Las legiones llegaron tarde al combate contra la horda de máquinas, que se abatieron sobre la ciudad de Sektares. Con las fuertes pisadas de las hordas de metal, la ciudad sufrió de tal forma hasta que no pudo soportar más y se derrumbó. No se salvó casi nadie, salvo los que habían huido al norte. El vil Ejército arrasó nuestros hogares y pueblos, derribó nuestras torres y devoró las murallas de nuestras tierras mientras nos masacraban.
La legión de sangre reunió a todos los guerreros disponibles y se abalanzaron contra los enemigos, pero fueron repelidos y acorralados en la ahora ciudad de Sektares reducida a escombros. Allí, tras la caída de la noche y el despertar de Gade, sus cuerpos fueron bendecidos y blandieron sus hachas y espadas con ira entre las líneas enemigas.
En medio de las filas de los Guerreros, cuando todos los demás habían caído ya, Akariku aún seguía vivo y rugía con furia en medio de la batalla. Los demás Shalldare que aún estaban vivos pero ya en el suelo de la arena inmóviles y demasiado agotados como para moverse observaban con asombro y admiración al mismo del que se habían burlado tiempo atrás, ahora en una armadura negra de la legión de sangre y luchando mano a mano junto con ellos, había logrado llegar hasta donde nadie más había llegado antes, no solo como un guerrero Shalldare puro, sino como el mejor entre ellos, cómo un Emperador de Sangre.
El ejército enemigo sucumbía ante sus golpes, pero a su vez seguía imparable e implacable.
En las últimas horas previas al alba, mientras los últimos guerreros que se quedaron a luchar soportaban el arduo combate llenos de heridas, Akariku resistió al pie de la pelea.
Al ver su inagotable determinación, El Rey Sinmorr quien estaba presenté luchando por su pueblo como un verdadero Rey, recordó aquella profecía que le dijo Ergef, y se llevó a Akariku, y lo mandó a completar la misma profecía por la que Shalldare había esperado tantos años.
Al recibir la marca de Tásar, el guerrero se enfrentó al juicio de la última hora de la noche. Allí, Tásar respondió con alegría y lo ensalzó con una resistencia y una fuerza capaz de causar un terremoto, dignas del Protector de Shalldare.
Lo que surgió del sagrado ritual no era más que la luz de la esperanza y la fuerza encarnadas en el cuerpo de un hombre; el héroe acabaría por ser conocido como Ak Akariku: el emperador de la sangre, el verdugo del Báratro, El Martillo de Shalldare.
El guerrero cuyos puños abrirían una senda para los justos y se lanzaría contra la horda enemiga con un poder que solo un dios podía otorgar. Se alzó revitalizado a pesar del ritual que quemó gran parte de su ya negra piel, con la llama del canto de Shalldare ardiendo en sus ojos. Alzó una simple hacha hacia el sol naciente y el canto de Shalldare la envolvió forjando un arma tan filosa que solo podían portar manos de un auténtico emperador de Sangre, era negra como su armadura, más afilada que cualquier otra y más letal, era la perdición de las máquinas en un trozo de metal oscuro.
En el día más horrible, Akariku había sido elegido, un forajido del sur había sido bendecido con un poder divino que lo marcaría en la historia a perpetuidad.
Con la llegada del ahora nuevo Emperador de la sangre, la legión avanzó más que nunca en su ataque contra el corazón de la tierra de las máquinas. Llevaron consigo a los más fuertes guerreros que aún quedaban, y se abrieron paso entre las hordas junto con Akariku y su ejército. Los Keerad, bajo la dirección de Dernell Olmstead, habían "encontrado" la forma de acceder a las regiones más profundas de los enemigos, y esto permitiría conocer sus debilidades para destruirlos.
Nuestras máquinas de guerra, creadas con tecnología y alimentadas por de la misma fuente que nuestros enemigos de metal, la energía suprema, eran invencibles, y con ellas fuimos adentrándonos más y más en el territorio empapado de su "sangre". Alcanzamos incontables victorias gracias al poder de Akariku, pues, con él, el enemigo estaba perdido y solo era cuestión de tiempo antes de poner exterminarlo.
Pero, sin que lo supiéramos o imaginaramos, en secreto, Dernell había ordenado a sus trabajadores que construyeran inmensas fábricas en tierras enemigas para poder absorber la "Energía" que alimentaba sus "vidas".
¿Cómo comenzó esta traición? sólo teníamos ojos para los enemigos. ¿Cómo íbamos a pensar siquiera que nuestro gran aliado durante tantos años pudiera siquiera atacarnos por la espalda?
Dernell nunca pareció contento con el inesperado ascenso de Akariku al trono de la divinidad... Nuestras legiones se alzaron libres bajo su fuerza, y su designio hizo que Dernell hallará réditos con su resurrección.
A Akariku no le interesaba en lo absoluto la política. Únicamente le interesaban las obras y cultura de nuestro pueblo, pero su meta era solo una: la destrucción de las máquinas y de todo lo relacionado.
Durante los siguientes años marchó con las legiones sangrientas a través de las llamas de las tierras del "tepgieree", y cada vez que regresábamos a nuestras tierras, nos encontrábamos grandes cambios en el gran pueblo de Shalldare. Si de algo nos hemos de culpar a los guerreros de sangre, es de que habíamos descuidado a nuestro pueblo y no nos percatamos del mal que crecía en el centro de nuestra cruzada. Solo sabíamos que el enemigo estaba frente a nosotros y no en otro lugar, o si?.
Pero, mientras Akariku y las legiones batallaban contra las huestes mecánicas, su incapacidad de actuar fuera de los confines de su deber permitió que la codicia de la "Esencia" hiciera su presa a los Shalldare avariciosos ansiosos de un poder como el de Akariku.
En el transcurso de una misión en las profundidades del reino mecánico directo al corazón del poder enemigo, la legión de sangre finalmente supo de la verdad de los Keerad y las Máquinas. Por voluntad de ellos, se había ocultado tanto a las legiones como al los propios Keerad fuera del círculo principal de Dernell el hecho de que la "energía suprema" de la que habíamos llegado a depender durante la guerra y durante nuestro desarrollo, estaba formada por los Cuerpos de los hermanos y hermanas que habíamos perdido combatiendo con las viles bestias de titanio.
Entendimos entonces que todos los que cayesen a manos de ellos se convertirían en combustible para los enemigos y para nosotros, mientras se les extraía el espíritu para destilar la Esencia que les daba vida... y a nuestro mundo.
Contemplamos con horrible asombro una de las bases dedicadas a esto, un lugar donde se procesaban los cuerpos, y donde eran triturados para que les extrajese la esencia para luego ser transformados en baterías que usarían para matar a más, y fabricar más, todo había Sido planeado por Dernell, para quedarse con todo el poder.
Pero fué peor aún que esta siniestra realidad fue el descubrimiento de la maquinaria utilizada para llevar cabo el vil proceso al que habían sido sometidos nuestros hermanos, pues su creación no era obra de los Robots que nos atacaban, sino de la mano de los Keerad.
Habíamos caído en manos del enemigo y la lucha que habíamos librado era una farsa, y lo peor era que no podíamos revelarlo ante el pueblo de los Shalldare. Pero, aun así, la lealtad de la legión de los guerreros de sangre no nos permitía dar la espalda a la verdad y mentir a nuestros hermanos, Dernell no seguiría siendo nuestra imagen de admiración...
Entre lugares escondidos, susurros y mensajes, los Guerreros de sangre buscaron a aquellos que desconfiaban como ellos de la Energía suprema. Al conocerse la verdad, muchos se sumaron a la rebelión y la brecha que separaba ambas facciones de los Shalldare comenzó a agrandarse, entre dependientes de la tecnología y leales a los dioses.
La verdad era innegable: las impías fábricas en las Tierras malditas funcionaban por mediación de la maquinaria Keerad. Dernell había traicionado a su propia madre, Shalldare, y había sido el responsable de la creación de las máquinas mortales para extraer nuestra Esencia.
Y ahora no solo planeaba quedarse en este mundo, sino que planeaba llegar a muchos más y llevar sus máquinas al nivel de una deidad. Si esto sucedía llegaría a todos los mundos y a todos los rincones de la existencia. Y no podíamos ignorar la culpa, pues era nuestra gente, los guerreros y los ingenieros Shalldare, fueron los que lo habían hecho posible.
Los guerreros de sangre hablaban del mal que había traído la energía suprema a todos los que les escuchaban. Habíamos ayudado a crear esta nueva dicotomía y, por tanto, los Shalldare también debíamos detener la propagación de esta enfermedad, esta nueva etapa de la existencia, esta suma de luz y oscuridad. No es por nosotros, es por los inocentes cuyos mundos tendrían que caer bajo el poder de Dernell y sus Infernales asesinos de metal, debíamos detener esto.
Pero incluso cuando los guerreros sangrientos regresaron del otro lado del mundo con historias sobre donde se condenaba a las almas de los inocentes, las masas adoctrinadas de Shalldare que creían en los Keerad se negaron a dar la espalda a los mismos. Su dependencia de la energía suprema era tal que ya ni siquiera respetaban a los dioses. Los Keerad, en su infinita sabiduría, se encargarían de que los fieles pudieran continuar su existencia siendo reencarnados en cuerpos más jóvenes. Temían la ira del Dios del conocimiento; una vida entera de servidumbre no podría desbaratarse a causa de una rebelión. Aquello no era más que una prueba de fe que permitiría identificar a los que realmente eran dignos de alcanzar la vida más allá de la muerte en el Renacimiento. Los Shalldare no titubearon en su celo, pero no sabían que eran solo farsas y mentiras, ellos no podían hacer realidad la vida tras la muerte y menos un renacimiento.
Las legiones de sangre se prepararon de nuevo para la guerra, pero esta vez lo harían para derramar la sangre de sus propios hermanos. Nuestros ejércitos habían presenciado con sus propios ojos las malvadas obras de los Keerad y conocían la verdad absoluta. Ellos habían vuelto a la senda de la herejía contra nuestros dioses al autoproclamarse como tales, y a pesar de que nuestro armamento había perdido parte de su fuerza al ser privado de la energía suprema, la justicia, nuestra lealtad y los dioses estaban de nuestro lado. Se había abierto una grieta en las filas de los Shalldare, y un bando se revelaba contra el mandato de los Keerad mientras el otro era prisionero de sus engaños y máquinas bonitas.
Nuestro Imperio rebelde Ascendido estaba formado por fieles y solitarios, y cantaba con las energías de un grupo de fuertes hombres y mujeres, enfrentándose al poder de las máquinas y los asesinos a sangre fría que se habían alineado con Dernell Olmstead. Y por su parte, los Guerreros leales a las tierras de Shalldare contaban con el pueblo libre y de el más poderoso de los guerreros que este mundo pudo engendrar, el mismísimo Akariku, El Verdugo del báratro.
La guerra civil se prolongó durante años y años, causando caos en los hombres y en las mujeres, cuyas armaduras y pieles estaban manchadas con la sangre de sus propios hermanos que ellos mismos asesinaron en un campo de batalla sin fin ni Inicio. Hasta que finalmente surgió la ocasión de acabar con la guerra, una última oportunidad descubierta por los líderes Guerreros de las legiones de sangre. Con Akariku a la cabeza, los últimos hombres se reunieron para atravesar medio mundo por última vez y llegar hacia el sur del planeta y regresar al corazón del enemigo.
Los Grandes líderes que mucho tiempo atrás, habían jurado lealtad a los mandamientos de los dioses, estaban al servicio de aquella misión como los últimos restantes. Aquellos que habían servido a los Dioses desde tiempos inmemoriales nos aseguraron que el camino estaba libre listo para ser inundado y destruido con nuestra ira.
Se trazó un plan para marchar contra las murallas de los metales más duros y destruir las fábricas, para cortar el flujo de la energía hacia las máquinas y negar a Dernell su poder.
Nuestras fuerzas empuñaron sus hachas y espadas y marcharon al son de un cántico glorioso... y fue entonces cuando encontramos una piedra en nuestros zapatos, la traición.
Al atravesar las densas nieblas interminables, las legiones pías se encontraron dispersas por todos lados y sumidos en un inesperado horror para el que no estaban preparados. Separados, las filas se desintegraron mientras nos llevaban a todos los rincones posibles en este lugar. Algunos de nuestros hermanos se encontraron cerca de los bordes de las nieblas por los que habían entrado, pero, al intentar regresar descubrieron que solo había piedra y metal por todos lados, y que los grandes líderes simplemente ya no estaban. Y en ese momento saltó la trampa y cada uno de ellos, solos y a ciegas en medio de la niebla, se encontró frente a frente con una multitud de máquinas que solo querían matar...
En las áridas tierras del sur del planeta, los valientes Guerreros Shalldare se encontraban abandonados por sus líderes y privados de refuerzos y apoyo logístico. A pesar de la adversidad, estos combatientes continuaron defendiendo su honor y luchando con ferocidad en lo que sería su última batalla contra las fuerzas enemigas. Sabiendo que la victoria era prácticamente imposible, los Shalldare desataron todo su poder y habilidades, desafiando las probabilidades y dando lo mejor de sí.
Enfrentados a una muerte segura, estos guerreros hicieron uso de su astucia y experiencia en el campo de batalla, aplastando máquinas y derramando aceite y lágrimas por centenares. Con valentía y determinación, lograron abatir ejércitos enteros del enemigo, infligiendo daños devastadores y causando gran conmoción en las filas enemigas.
Finalmente, tras horas de lucha, las armas de los Shalldare se apagaron y sus Armaduras se quedaron sin energía. Pero aún así, no retrocedieron ante la muerte. Con las últimas fuerzas que les quedaban, rugieron "¡Denra sere sekkera!" y se enfrentaron a sus enemigos con una valentía que dejó a todos atónitos.
Dernell conocía a los Traidores, pues era evidente que los Keerad y los Líderes Guerreros habían sembrado el árbol de manzanas del Edén mucho antes de que los valientes guerreros atravesaran los valles.
Aquel día, la batalla que libraron los Shalldare contra las fuerzas enemigas quedó grabada en la memoria de todos aquellos que la presenciaron. Los Guerreros, abandonados por sus líderes y privados de todo refuerzo, se encontraban en una situación desesperada. Sabían que la victoria era imposible, pero aun así, decidieron enfrentarse a sus enemigos con todo su honor y valentía.
En un despliegue de fuerza sin igual, los Shalldare demostraron su coraje y determinación en la que sería su última batalla. Con sus Armaduras y espadas relucientes, hicieron frente a los miles de enemigos que los rodeaban, dispuestos a luchar hasta la muerte. Los cielos retumbaron con sus rugidos de guerra, y las máquinas se estremecieron ante la fuerza de sus golpes.
Fue una lucha épica, en la que los Guerreros sagrados demostraron su inquebrantable espíritu y su devoción por la causa. A medida que la batalla avanzaba, su ardiente fuerza se hacía cada vez más evidente, y las máquinas que los enfrentaban comenzaron a temblar ante su poder.
En ese momento, las máquinas presenciaron la grandeza del pueblo sagrado de Shalldare. Fueron guerreros dignos de la leyenda, cuyo destino debió haber sido el de los dioses de la batalla. Y aunque el cielo les era indigno, su memoria fue grabada para siempre en la historia de este universo.
La resistencia de los Shalldare fue implacable, una lucha encarnizada que se llevó consigo la vida de muchos, pero no la voluntad de aquellos que seguían en pie. No hubo tiempo para lamentos, solo la certeza de que su destino estaba en sus manos. La muerte era una sombra constante que acechaba, pero ellos, hijos de este mundo, nacidos para la victoria, no se dejaron doblegar.
En medio de la confusión, un Shalldare logró infiltrarse y, sin importar el costo, hizo estallar la fuente de la Energía suprema, desatando una explosión que sacudió los cimientos del mundo. La oscuridad y el caos fueron los últimos compañeros de aquel héroe anónimo, cuyo sacrificio permitió a los demás seguir luchando.
El líder Akariku fue el encargado de llevar a cabo la justicia divina, su mano certera acabó con los líderes guerreros traidores y el mismísimo Dernell Olmstead no fue la excepción. Fue un final brutal para un hombre que alguna vez se creyó intocable, empalado en una pared y con la cabeza aplastada.
Sin embargo, el rumor de que Akariku seguía con vida se propagó por todo el universo, aunque nadie pudo comprobarlo. Era un mito, una leyenda, pero nadie podía negar que su presencia, o la ausencia de ella. ¿Acaso seguiría luchando? ¿O habría encontrado su propio camino hacia la eternidad? Nadie lo sabía con certeza, pero su legado perduraría en las historias que se contarían durante generaciones.
Año: 6510 (ADL)
En este mundo desgarrado por la corrupción de los creadores de la energía suprema, solo queda un destello de esperanza: aquellos valientes hermanos que sobrevivieron y que tienen la capacidad de restaurar la gloria de Shalldare, erradicando la tecnología sacrílega que la infectó. Su valentía y habilidad en las artes Shalldare les dan la fuerza necesaria para luchar y vencer, aunque ellos ya no las conozcan... el nacimiento de los Shalldare de granja.
Si, como se rumorea, Akariku sigue con vida, que lleve adelante su venganza con mano firme y sin piedad. Que no descanse hasta que los responsables de la ofensa sufran las consecuencias. Que su mano se tiña de sangre y no se detenga hasta que cada máquina sea castigada. Que su guerra sea inclemente, hasta que la sombra del metal desaparezca de este mundo y de todo el universo, purificándolo.
Que se escuche su rugido de guerra, que la venganza de Akariku sea como un relámpago en la oscuridad.
Kerre gike sekkera, pga ak akariku sōake surrer ganefte.
Mā Tekra lôrne
Mā Tekra lôrne
Kīnū Dīse yārne
Dōluje kēsō teftū
Vērne nā Lājū kēe
Mā Tekra lôrne
Kīnū Dīse yārne
Dōluje kēsō teftū
Vērne nā Lājū kēe
Drēstō nā Kālte
Serekôu barke nōstrū sērne
Frēntō jīnō nā Dūkla
Sīkā hevrū kēth fōrrō
Sīkā hevrū kēth fōrrō
Mā Tekra lôrne
Kīnū Dīse yārne
Dōluje kēsō teftū
Vērne nā Lājū kēe
Mā Tekra lôrne
Kīnū Dīse yārne
Dōluje kēsō teftū
Vērne nā Lājū kēe
Drēstō nā Kālte
Serekôu barke nōstrū sērne
Frēntō jīnō nā Dūkla
Sīkā hevrū kēth fōrrō
TRADUCCIÓN
Mi madre me dijo
Mi madre me dijo
Pronto un día compraré
Barcos con buenos remos
Navegaré hacia costas lejanas
Mi madre me dijo
Pronto un día compraré
Barcos con buenos remos
Navegaré hacia costas lejanas
Estoy de pie en la proa
Barca noble que nosotros guiamos
Rumbo firme hacia el refugio
Golpearé a muchos enemigos
Golpearé a muchos enemigos
Mi madre me dijo
Pronto un día compraré
Barcos con buenos remos
Navegaré hacia costas lejanas
Mi madre me dijo
Pronto un día compraré
Barcos con buenos remos
Navegaré hacia costas lejanas
Estoy de pie en la proa
Barca noble que nosotros guiamos
Rumbo firme hacia el refugio
Golpearé a muchos enemigos
CÓDICE DE PALABRAS
Palabra Shalldare Español Explicación semántica / etimología
Mā Mi Forma poética reducida de “mīō” (mío)
Tekra Madre Sustantivo para madre
lôrne Me dijo Verbo “lôr” (decir), conjugado pasado
Kīnū Pronto / próximamente Adverbio de tiempo
Dīse Día También usado como “algún día” en sentido lírico
yārne Compraré De “yūfe” (dar) y “ārne” (intención) → forma verbal
Dōluje Barcos / galeras De “dōlu” (vehículo) + “-je” (sufijo plural marítimo)
kēsō Buenos Adjetivo de calidad (de keitô)
teftū Remos De raíz tef (mano, herramienta)
Vērne Navegaré Verbo de raíz verīke (transporte)
nā Hacia Preposición simplificada (derivada de “jātū” con función poética)
Lājū Lejano Adjetivo ya registrado
kēe Costas / orillas Derivado poético de kee (día), como símbolo de frontera
Drēstō Estoy De “Êstû” (estar), conjugado presente
Kālte Proa Derivado de “kālto” (alto), parte frontal de un barco
Serekôu Noble Literalmente “caballero” en Shalldare
barke Barca Versión corta y eufónica de “barco”/vehículo acuático
nōstrū Nosotros Usado para reflejar linaje y legado (inclusión de la madre)
sērne Dirijo / conduzco Verbo de control/guía
Frēntō Firme Adjetivo de dirección firme o sin desvío
jīnō Rumbo De “jīnve” (norma, dirección)
Dūkla Refugio / puerto Literalmente: "exterior protegido"
Sīkā Golpearé / cortaré Verbo activo, ofensivo, épico
hevrū Enemigo De hevrū = enemigo/contrario
kēth A (acusativo poético) Variante poética de la preposición
fōrrō Muchos De “fōrōto” (mayoría), usado aquí como plural acentuado
Un curso introductorio para todas las edades, accesible e intuitivo
El alfabeto Shalldare
El alfabeto contiene 19 letras:
a, d, e, f, g, h, i, j, k, l, m, n, o, r, s, t, u, v, y
Las vocales son:
a, e, i, o, u, y
Las demás son consonantes.
El macrón:
Una línea sobre una vocal como “ū” indica que se pronuncia más largo:
u = corto → como "u" en luz
ū = largo → como "uuuuu" al cantar
Pronunciación
Letra Suena como en...
a "a" en "casa"
e "e" en "mesa"
i "i" en "vino"
o "o" en "loco"
u "u" en "puro"
y como "i" en inglés ("happy")
j como "y" en "yo"
g siempre fuerte: "g" en "gato", nunca como en "gente"
¿Y si hay una palabra con muchos signos raros?
¡Solo sigue el ritmo! Las palabras Shalldare están hechas para sonar como si estuvieras cantando o declarando algo solemne.
Cómo se forman las palabras
Shalldare tiene una estructura básica:
Tipo de palabra / Termina en… / Ejemplo
Sustantivo Vocal (a/e) drūme = tierra
Verbo Consonante Sōdke = proteger
Adjetivo Variable, antes del sustantivo drōlu sôdufe = buena persona
Pronombre Corto, antes del verbo Ā Sērne = yo guío
Tiempos verbales básicos
Tiempo Cómo se forma Ejemplo
Presente Verbo normal Ā sērne = yo guío
Pasado Agrega -ve Ā sērneve = yo guié
Futuro Usa Kīnū + verbo Ā Kīnū sērne = yo guiaré
¿Cómo digo “yo protegeré”?
→ Ā Kīnū Sōdke
Los pronombres
Español / Shalldare
Yo Ā
Tú Ti
Él / ella Iēl
Nosotros Nōstrū
Ellos Ēllū
Frases básicas para practicar
Español / Shalldare
Hola Hūr
Adiós Sāl
Gracias Sālur
¿Cómo estás? Hū Êstū ti?
Estoy bien Ā Êstū vod
Me llamo (nombre) Ā Nāmū (nombre)
Hoy hay guerra Huo Hē Rānū
Te protegeré Ti Kīnū Sōdke
Esta es una blasfemia Tīrā Iks Tār Yarnôfe
Cómo se habla en frases
Orden de las palabras:
[Sujeto] + [Verbo] + [Complemento] + [Preposición (si hay)]
Ejemplo:
“Yo vivo en la tierra” → Ā Vivke drūme Nē
Construyamos una frase completa
Español: “Nosotros traeremos la espada para la defensa”
Sujeto: Nōstrū
Verbo en futuro: Kīnū trērne (traeremos)
Complemento directo: sōne (espada)
Final de propósito: Vīrndōn Sōri (para defensa)
Nōstrū Kīnū trērne sōne Vīrndōn Sōri
La sociedad Shalldare se rige por un principio tan antiguo como la piedra negra: el Honor Recíproco. Todo acto de servicio, auxilio o entrega crea una deuda sagrada no escrita, cuya existencia es reconocida por el Canto mismo. No cumplir una deuda de honor es deshonra; no aceptar el reembolso, arrogancia.
Cada acción generosa se convierte en un eslabón invisible entre dos almas. Cuando uno salva la vida de otro, forja un lazo que trasciende el tiempo: aquel que fue salvado debe estar dispuesto a morir por su salvador si el momento llega. No existe mayor insulto en la lengua Shalldare que acusar a alguien de "haber cortado el hilo del deber".
“No hay gloria en matar si nadie queda para recordarlo. Pero sí la hay en devolver una espada que ya se alzó por ti.”
— Shall-Emperor Dēkran, Portador del Primer Lamento
Este sistema da forma a su comercio cultural, pues entre los Shalldare todo objeto posee memoria. Las armas no se compran: se otorgan como voto de lealtad. Regalar un arma es equivalente a entregar un fragmento del propio Canto.
Se considera sagrado otorgar:
Dagas con inscripciones rituales.
Hachas con filos bendecidos por fuego lunar.
Armas de fuego talladas a mano.
Brazaletes con hojas retráctiles.
Colgantes dentales: collares hechos de dientes de depredadores o enemigos caídos, son símbolo de fuerza compartida.
Dar una de estas reliquias a un forastero o a un miembro de otra especie es una muestra de confianza máxima. Implica que el receptor ha sido aceptado como honrado entre iguales.
Protege a los tuyos como esperas ser protegido. La fuerza sin escudo no es honor: es soberbia.
No permitas que te capturen. Si no hay fuga, muere con los dientes apretados. La vida sin honor es una cadena sin eslabones.
No mates a quien no puede defenderse. Golpéalo. Humíllalo. Pero no lo mates. Tu filo no debe mancharse con cobardía.
Entierra a tus muertos, sean tuyos o ajenos, con el mismo respeto. Toda carne deviene ceniza. Todo nombre merece una nota.
No confíes en lo que piensa sin alma. No sirvas a la máquina. Solo tus armas y armadura conocen tu sudor.
No desperdicies la voz. Habla sólo si lo que dices puede ser cantado. El silencio es filo. La palabra, escudo. No ambos a la vez.
Jamás mientas a un hermano de sangre. La mentira es niebla. La niebla engendra herejía. Y la herejía no tiene eco en el Vacío.
“Las reglas no son cadenas. Son el canto de los muertos que aún nos observa.”
— Shall-Empress Vērua, la Boca Silente
El Juicio del Sol y la Prohibición de Sangre Nocturna
Los Shalldare veneran a sus dos deidades, Tasar y Gade, como fuerzas complementarias de creación y destrucción, cuya unión es sagrada y frágil. Según su religión, las noches estrelladas representan el único momento en que ambos pueden encontrarse en el cielo. Cada estrella es un punto de anclaje entre sus voluntades. La sangre derramada en ese instante interrumpe la danza cósmica, desgarra el ritmo universal.
Por ello, matar durante la noche es blasfemia. Solo aquellos tocados por el sufrimiento divino, conocidos como Los Elegidos de los Dioses (Yārkūse), tienen permitido hacerlo. Son guerreros que sobrevivieron a la muerte, a condiciones inhumanas, y que portan en su cuerpo las marcas de la divinidad.
No todos pueden matar de noche. La noche, como se ha establecido, es sagrada: en ella Tasar y Gade se miran entre estrellas. En ella bailan y se funden. En ella respira el cosmos sin violencia. Matar en ese momento es quebrar la danza, corromper el aliento divino, extinguir la música universal que fluye entre galaxias.
Cuando un Shalldare sobrevive a una muerte cierta sin ayuda, los sabios interpretan su cuerpo como una carta enviada por los dioses: “este no morirá como los demás.”
Honores recibidos:
Derecho a portar el Filo de Sombra, una hoja sin reflejo.
Permiso ritual para matar de noche sin incurrir en blasfemia.
Su nombre es grabado en un eje obsidiano bajo Yērlūne.
Sus palabras pueden interrumpir una orden imperial.
“Mi pecho fue abierto por un diente de volcán. Mi sangre ardió sobre hielo. Y aún así, aquí estoy. Entonces, ¿quién decide si debo contener mi furia en la noche?”
— Vārlek Hurn, llamado El Cuervo de Medianoche
“Durante seis noches bebí de mi propia orina y comí musgo de hueso. Cuando regresé, mi sombra no me reconocía. Por eso me aceptaron como uno de los Yārkūse.”
— Ṭehl Sēfran, cazadora de los valles ácidos
“El que sangra y no muere no pertenece a este plano. Pertenece a la noche, para protegerla.”
— Sabio de Hueso Blanco Thērk Nūrōn
Castigo por la sangre nocturna injusta:
Ahogamiento ritual en el Lago de Rēfrūn.
Prohibición de ser cantado en el Canto de Muerte.
“Antes de Akariku, antes del fuego, hubo palabra. Y la palabra era Vōtske: voluntad. Y la voluntad, sin carne, no era nada. Por eso la carne fue atada al juramento.”
En la sociedad Shalldare, no existen los "derechos de nacimiento", solo las voluntades probadas. Desde tiempos ancestrales, incluso antes de la unificación tribal, los Shalldare forjaban su identidad mediante juramentos sellados en sangre, conocidos como "la promesa sobre la tierra".
Todo Shallase que desee hablar ante su clan debía primero demostrar su vōtske. No se accede al consejo por linaje, sino por la demostración repetida de fuerza, silencio, y capacidad de sacrificio.
“Quien no sangra por su palabra, no la merece.”
— Frase del Shall-Emperor Vārgon el Inquebrantable
Los Shall-Emperors fueron más que reyes: fueron conductos de la divinidad viviente. Cada uno de ellos llevaba un título no autoimpuesto, sino concedido por la asamblea de los viejos: los Efseklt Sērō o también llamados “sabios de hueso blanco”.
Aquí algunos de ellos:
Shall-Emperor Dēkran “El Portador del Primer Lamento”
Dēkran guio al pueblo en la era de la división. Se le atribuye el primer uso de la frase:
“Cuando el enemigo ofrece paz, pregunta con qué mano carga la daga.”
Shall-Empress Vērua “La Boca Silente”
Jamás pronunció palabra tras la muerte de su hija en batalla. Gobernó por gestos y miradas durante cuarenta años.
“El silencio es una lanza más larga que el rugido.”
Shall-Emperor Haskir “El que Bebe la Tormenta”
Murió en batalla contra los Drones de Sangre. Se cuenta que abrió su propio vientre para cargar dinamita líquida y derribar el pilar enemigo. Su sangre evaporó el suelo.
“Morir rugiendo es morir mil veces. Morir útilmente es reencarnar.”
La cúspide de la sociedad Shalldare es ocupada por el Shall-Emperor, un título que no se hereda ni se solicita. Se revela.
Se dice que el Shall-Emperor es la voluntad encarnada de Shalldare como entidad viva. Su voz no le pertenece a él, sino al Canto. Su juicio no nace del ego, sino de la sangre acumulada por las generaciones.
Solo puede haber uno a la vez. Nunca han coexistido dos, y se considera herejía nombrar uno en vida de otro sin que el anterior renuncie mediante un ritual de silencio: la Exhalación Final.
Cita del Shall-Emperor Hādrul “El Que Calló Primero”:
“Yo no soy hombre. Soy la rama en que posa la tormenta. Soy el filo que porta la tierra. Si me temes, no es a mí: es a la voz que canto y no entiendo.”
El título alternativo “Emperador de Sangre” no es ceremonial, sino místico. Solo los Shall-Emperors que han sangrado tres veces en la misma batalla sin caer, y han pronunciado el Canto con heridas abiertas, reciben esta denominación.
Estos emperadores no solo gobiernan, sino que canalizan. Son considerados portales temporales por los cuales Shalldare, como ente consciente, actúa directamente sobre el plano material.
“Cuando un Emperador de Sangre levanta el hacha, no es él quien corta, es la voz de todos nosotros, vivos y muertos.”
— Serekol Mārne, Vīlhūr
Uno de los más legendarios pre-Akariku fue Shall-Emperor Kuldren “El Mirador de Ojos Vacíos”, quien perdió ambos ojos en la guerra contra los Keerad y, aun así, derrotó a 47 máquinas en combate ciego mientras recitaba el verso número 13 sin vacilar.
Sabios de Hueso Blanco — Los Efseklt Sērō
Debajo del Shall-Emperor se encuentran los Sabios de Hueso Blanco, conocidos por llevar collares hechos de la tibia blanqueada de sus ancestros. Este título no es otorgado, sino reclamado tras sobrevivir a la Ordalía del Vacío: una ceremonia en la que el aspirante debe caminar desnudo durante una noche entera en el Desierto de Dervú, sin armas, sin fuego, sin voz.
Cuando regresan vivos, se les graba un verso del Canto en el hueso frontal del cráneo con una aguja de oro. Desde ese momento, sus palabras adquieren rango de ley si el Shall-Emperor calla ante ellas.
Los Efseklt Sērō son los guardianes de la Memoria y el Juicio. Sus funciones incluyen:
Determinar la legitimidad del nuevo Shall-Emperor.
Declarar blasfemia.
Interpretar el Canto en momentos de guerra o duda política.
Portar el Fylāk-Sēnus, el símbolo de visión espiritual: un cristal oscuro que solo puede ser sostenido por quien no haya mentido jamás a su tribu.
La Sociedad Extendida
Rango / Nombre / Descripción
Emperador Shall-Emperor Voz suprema. Voluntad encarnada.
Sabios Efseklt Sērō Guardianes del juicio, el recuerdo y la historia oral.
Altos Comandantes Dūlnar Dirigen ejércitos. Solo pueden ser nombrados por un Emperor o por consejo unánime de sabios.
Portadores del Canto Vīlhūr Poetas oraculares. Transmiten los fragmentos vivos del Canto. No tienen autoridad política, pero su palabra puede vetar decisiones.
Elegidos de las Lunas Yārkūse Guerreros que han sobrevivido a muerte segura. Pueden matar de noche.
Sacerdotes de Yērlūne Sērkūnē Custodios de las reliquias. Su función es preservar la sinfonía espiritual del pueblo.
Ciudadano común Shallase Guerreros, constructores, madres, artesanos. Todos deben saber el Canto, al menos los 14 primeros versos.
Blasfemos Skēfūtōn Aquellos que mataron bajo las estrellas, o traicionaron su juramento. Su alma se ahoga en el Vacío.
Los Shalldare no ven su planeta como una tierra o un estado. Para ellos, Shalldare es una mujer viva. Una entidad que respira a través del fuego, del canto, de la lengua.
“Ella llora cuando mentimos. Ella sangra cuando matamos sin honra. Ella canta cuando uno muere por todos. Ella es madre, hija, amante y tumba.”
— Canto atribuido a Vīrhūnē, la primera Vīlhūr conocida.
Cuando un Shallase muere, su nombre es entonado en la forma más antigua del idioma, y se graba en piedra para que Shalldare lo recuerde. Se cree que al hacerlo, la tierra siente menos dolor. El Canto es la forma en que la tierra respira.
Mito del Elegido — Fragmento atribuido a Hēlka’Dren, tercer Shall-Emperor
“Nacerá bajo una estrella que no gira.
Y sangrará antes de hablar.
No será hijo de nadie, pero todos lo llamarán hijo.
Su voz hará temblar montañas.
Su sangre no será roja.
Él hablará en versos que los sabios temerán,
y donde camine, nacerán flores.
Él no vendrá a gobernar.
Él vendrá a recordar.”
— Canto final del Templo de Yērlūne, inscrito en oro sobre obsidiana.
Se cree que Akariku es la realización de este mito. Hijo de nadie, aceptado por todos. Muerto y revivido. Silente y furioso. Un guerrero cuya espada se convirtió en símbolo, y cuya muerte, si es que ocurrió, aún no ha cesado de arder en el silencio del bosque.
“El planeta nos habla. Y no con palabras, sino con sílabas enterradas en la piedra.”
— Efseklt Rūlkar, sabio de hueso blanco
El Canto de Shalldare no es solo una expresión cultural. Es el eje de toda espiritualidad, lenguaje, y moralidad. Según las creencias, Tasar creó el Canto como puente para que las almas puedan cruzar hacia Gade tras la muerte.
¿Qué es exactamente el Canto?
Una sucesión de versos orales que contienen no solo historia, sino también doctrina, ley y rito.
Una melodía viviente, con cadencias específicas que deben ser entonadas en voz baja, al amanecer.
Una llave espiritual: sólo aquellos que conocen los versos pueden hablar en el Juicio del Vacío cuando mueren.
Los 14 primeros versos son obligatorios para todo Shallase. Se enseñan desde la infancia en los rituales de infancia conocidos como "el pulso del linaje".
“Quien no canta, no regresa.
Quien olvida el verso, se extravía.
Quien lo falsifica, jamás será hallado.”
Aquí estoy, tierra de mis huesos.
Aquí mi sangre, antes de la herida.
No hablo en mi lengua, sino en la tuya, oh Shalldare.
Doy mi nombre a la piedra, y callo.
Mis manos son ramas, mis pies raíces.
En la noche guardo la lanza.
En el día, la lanzo.
No seré el primero en gritar.
Pero sí el último en caer.
El enemigo no es quien me golpea.
Es quien olvida tu canción.
Shalldare, madre negra, fuego de hueso.
Guíame al vacío donde los dioses bailan.
Déjame ser nota, no eco.
Estos versos deben entonarse en cadencia descendente, con la última sílaba de cada verso arrastrada en susurro. En rituales de entierro, el cuerpo del guerrero es incinerado mientras los Vīlhūr (guardianes del Canto) repiten los versos en orden inverso, para guiar el alma de regreso a la raíz.
Personajes legendarios previos a Akariku
Thūn Karran — La Madre de la Voz
Primera Vīlhūr reconocida. Ciega de nacimiento, pero capaz de recitar los 120 versos del Canto sin errores. Se cuenta que su voz provocaba temblores menores en la piedra caliza, y que su sangre curaba cuando era cantada sobre heridas abiertas.
“Ella no hablaba. Ella vibraba.”
— Fragmento de pergamino conservado en Yērlūne
Sār Delbrak — El Traidor Resucitado
Guerrero que, por error de juicio, mató durante la noche. En lugar de ahogarlo, el Shall-Emperor Dēkran permitió que sirviera como vigía eterno en la cima de Sekkūrn-Har, donde no hay noche ni sombra. Allí entonaba solo el verso número 6, repitiéndolo hasta su muerte por hambre:
“En la noche guardo la lanza.”
Su castigo fue recordar eternamente la línea que traicionó.
Durante siglos se creyó que el Canto de Shalldare era un poema sagrado de catorce versos, transmitido en la iniciación infantil y repetido en funerales, ritos de batalla y ceremonias de unión. Sin embargo, con el paso de los ciclos solares y el descubrimiento de las tablillas del cráneo de Thūn Karran, se comprendió que esos catorce versos no eran más que la raíz visible del árbol, un fragmento reducido para el uso cotidiano.
Los estudios del templo de Yērlūne revelaron que el Canto completo posee al menos 243 versos, aunque algunos Vīlhūr afirman que su verdadero número cambia según el hablante y el momento espiritual del planeta. Es un poema vivo, no fijo. Se transforma con la historia del pueblo, muta en sus tragedias, se estira o contrae con el dolor colectivo. En consecuencia, cada entonación completa del Canto agrega a Shalldare una nueva capa de memoria.
El sabio Rēf Kar-Norr, fallecido a los 312 ciclos, afirmó en su exilio que “el Canto no es algo que uno memoriza, es algo que uno recuerda sin haber vivido”. Su discípulo grabó en obsidiana que Rēf recitó 274 versos antes de desmayar, en una sola noche de éxtasis espiritual, mientras las piedras del templo vibraban al unísono.
“Los versos del Canto no tienen fin. Solo silencio.”
— Dīshar Varnak, Vīlhūr del círculo de Gālhērn
Yērlūne no fue construido. Fue revelado.
Según las escrituras litográficas, en un tiempo donde el mundo se cubría de metal y las estrellas ardían como cuchillas, la tierra se partió por voluntad del Canto, y emergió un valle oculto entre las rocas ancestrales del continente olvidado de Varserûn. Allí, una montaña se abrió como una flor petrificada, y del interior surgió una cavidad perfecta, de 12 kilómetros de diámetro y 3 de profundidad, con techos tan altos que el eco tarda cinco segundos en regresar.
Ese lugar fue nombrado Yērlūne: “el suspiro entre las estrellas”.
El templo fue adaptado, no construido, pues su geometría ya era armónica. Las piedras de su interior, hechas de basalto negro y esporas minerales, emiten vibraciones al ser entonadas con versos del Canto. Cada columna responde a una sílaba sagrada. Cada corredor refleja una frecuencia. Los Vīlhūr de alto rango afirman que Yērlūne no es un templo, sino una garganta cósmica, una catedral del planeta para hablar consigo mismo a través del pueblo Shalldare.
En su centro yace la Piedra Negra, un monolito de diez metros que absorbe luz, temperatura y sonido. Se cree que está viva, aunque no consciente. Sus orígenes son desconocidos, pero los sabios la relacionan con el meteorito original que trajo la semilla de Shalldare al mundo.
“No veneramos la piedra negra por su poder, sino por su silencio. Ella nos observa sin juzgar. Y solo canta para quien ya ha muerto.”
— Efseklt Sūr’Rān, custodio de las cámaras del eco
La piedra negra no fue esculpida. No fue colocada. Fue descubierta al abrirse el corazón de Yērlūne. Desde entonces, ha sido considerada el ombligo espiritual del planeta, una forma de conciencia no humana, anterior incluso a Tasar y Gade. No se le adora. Se le respeta. No responde. No se invoca. Pero escucha.
Cuando un Shall-Emperor muere, su cuerpo es depositado frente a ella, y una línea nueva es tallada en su superficie, aunque nadie la toque. Cada línea es un verso no pronunciado, reservado para los muertos. Algunos sabios creen que la piedra es el verdadero Canto, y que los versos humanos son intentos torpes de replicar lo que ella emite en una frecuencia que solo los astros entienden.
“Si Shalldare tuviera garganta, sería de piedra.
Si tuviera alma, estaría atrapada en ese bloque.”
— Karned Vel, Vīlhūr errante, ejecutado por heresía estructural
La lanza cayó antes que mi cuerpo.
Mi lengua murió antes que mi pecho.
Y aun así, aquí estoy.
No por mí, sino por todos.
No por gloria, sino por recuerdo.
Que mis huesos alimenten la tierra.
Que mi eco no despierte al enemigo.
Que mi canto cierre el ciclo.
Mi rostro ya no es mío.
Soy mil ojos que miran desde las grietas.
Soy el fuego que no quiere quemar, pero debe.
Soy la voz de quienes murieron sin nombre.
Shalldare, tómame de vuelta.
Tómame, y hazme llama.
SHALLDARE
Reglas de escritura para el idioma Shalldare
Orden alfabético: a d e f g h i j k l m n o r s t u v y
Separación de vocales y consonantes:
Vocales: a e i o u y
Consonantes: d f g h j k l m n r s t v
Reglas gramaticales:
Las palabras en Shalldare suelen tener una estructura que sigue la consonante-vocal-consonante (CVC).
Los sustantivos generalmente terminan en vocal "e".
Los verbos suelen terminar en consonante.
Los adjetivos preceden al sustantivo y concuerdan en género y número.
Los pronombres personales son cortos y se colocan antes del verbo.
Las preposiciones se colocan al final de la frase.
La línea encima de las vocales, como en la "ū", se llama macrón. El macrón indica que la vocal sobre la cual está colocado debe pronunciarse de manera más larga que su equivalente sin el macrón.
Sustantivos
Gente
Shalldares= Shalla
Shalldare= Shallase
persona=sôdufe
gente= Surma
hombre=hutrra
mujer=tōoô
bebé=raré
niño, niña= yiju / yije
adolescente= ekuadsva
adulto, adulta= ekōkvu / ekōkve
anciano, anciana= efsefu / efseklt
don, doña= kuf / kufñ
señor, señora= dannur / danure
caballero= serekkôu
dama= kette
individuo= ikiigōu=
Cuerpo Shalldare y salud(sōôsu Shallase o dekōk)
cuerpo= sōôsu
pierna= serfe
pie= Ee
talón= vekóf
espinilla= adsiikke
rodilla= rukikke=
muslo= tōdku
cabeza= serte
cara= serke
boca= rusel
labio= keriu
diente= kefva
ojo= ogue
nariz= ferit
barba= ferre
bigote= riruva
cabello= serakku
oreja= uraoe
cerebro= sôarru
estómago= advóteru
brazo= rretu
codo= suku
hombro= hutrru
uña= ōwe=
mano= teftu
muñeca= tōfase=
palma= sekte
dedo= kaku
trasero, culo, cola, glúteos= vredôu / sōku / suke / rkúvaud
abdomen= erkutaf
hígado= hereku
músculo= túdsōku
cuello= sōukku
corazón= surtóff
mente= tafva
alma= sekoôe
espíritu= adserivō
pecho= sasu
cintura= sivōe
cadera= ekte
espalda= adsekke
sangre= denrra
Pene= Kuksaf
Vagina= Sōddo
carne= serfka
piel= sek
hueso= hōadu
resfriado= radsieku=
gripe= rrisa
diarrea= kierri
salud= dekōk
enfermedad= aôtakek
Familia y otras relaciones
familia= Setike
amigo, amiga= Etiru / Etire
conocido, conocida= Sufusikô / Sufōske
colega= Súkare
pareja= Serōoe
Amor= Keitô
esposo, esposa= Adsōdu / Adsudú
matrimonio= Tevritfô
padre= Sekra
madre= Tekra
hermano, hermana= Hôttefu / Hoôtefam
hijo, hija= Hiōú / Hiôe
abuelo, abuela= Erōaku / Erôkae
bisabuelo, bisabuela= Riderōaku / Riderôkae
nieto, nieta= Fevu / Feve
bisnieto, bisnieta= Ridfevu / Ridfeve
primo, prima= Sritu / Srite
tío, tía= Veú / Veeô
sobrino, sobrina= Durriú / Durriô
Vida
criatura= Srievōe
especie= Adsase
ser= Dô
vida= Kiga
nacimiento= Festefv
reproducción= Rasurkōss
muerte= Tova
Geografía(Rarruerse)
naturaleza= Fevōkate
campo= Setsu
bosque= Rudga
selva, jungla= Dakge / Oōnke
desierto= Dervú
costa= Sudve
playa= Skeoe
río= Reōu
laguna, lago= Keree / Keru
mar, océano= Ter / Uséefu
cerro, monte, montaña= Sōru / tôfva / Tufvén
luz= Kōt
energía= Afôree
Plantas y alimentos
alimento= Ekitfvu
comida= Sutike
bebida= Rarike
vegetal= Garavek
planta= Skefve
pasto, césped= Sedvu / Sédsak
flor= Skur
fruta= Srôve
semilla= Datikke
árbol= Árruk
hoja= Huôe
raíz= Reet
tallo= Vekku
hongo= Hunu
arroz= Errut
avena= Egaf
trigo= Vrirrō
verdura= Gokôe
patatas, papas= Skevved / ksesed
carne= Ferfa
gaseosa= Redaô
Tiempo
tiempo= Vetsu
calendario= Sekafkeiu
edad= Ekek
época, era= Ekuse, Ôes
fecha= Sase
instante= Idverva
momento= Tutarvu
segundo= Dareku
minuto= Tiōvu
hora= Hkúrô
día= Kee
semana= Datef
entre semana= Afvra Datef
fin de semana= Sin ka datef
mes= Tad
año= Eñu
década= Késeke
siglo= Dirku
milenio= Tikafiu
ayer= Eoô
hoy= Huo
mañana= Tenefe
amanecer= Etefasô
mediodía= Tatiukee
tarde= Verka
anochecer= Efusasô
noche= Fusa
Espacio (Adsesiu)
ambiente = kōtsa
espacio = adsesiu
entorno = ferlik
área = krīna
superficie = tēnve
volumen = golvu
región = jidre
zona = viuka
lado = kerte
mundo = yudne
planeta = darlu
sol = fiul
luna = gorri
estrella = rasti
galaxia = hivre
universo = yōvar
clima = dueti
despejado = gōvrid
nublado = tsanēr
lluvia = nedra
nieve = jurna
viento = lōrgo
trueno = zoundre
rayo = vurtu
tormenta = furīk
cielo = veide
este = rendi
oeste = dasti
sur = tuani
norte = giros
derecha = hezū
izquierda = fōdira
diagonal = virōg
exterior = dūkla
interior = jīkra
Materiales
calor = hīnde
agua = kūra
hielo = jōko
vapor = tēva
fuego = jōfu
gas = hūsa
aire, atmósfera = sūla
tierra = drūme
piso = gīsa
suelo = jisū
metal, metálico = sītū
hierro = virū
oro = gyūra
plata = fīla
plomo = gūra
sal = drūsa
barro, lodo = yūno
Medidas
peso = gādu
metro = jītu
milímetro, centímetro, kilómetro = milo, cendro, kūlo
litro = vātu
gramo = kufro
kilo = viru
cantidad = kuāte
total = suvne
medida = jīma
Sociedad
honor = Hufur
invasión = Igede
blasfemia = Yarnôfe
sociedad = fītave
comunidad = krēseve
reunión = yūkene
encuentro = givote
estructura = sārufe
administración = jīdasheve
organización = drūmena
asociación = yūvirane
empresa = gōvne
equipo = jūlse
autoridad = ledrōnve
cargo = yūvu
campaña = sāvade
club = dōkure
comisión = virūne
congreso = dāvise
consejo = vardī
partido = drūmvare
país = fūne
nación = jurūne
gobierno = drūsta
estado = jinre
provincia = tsilove
departamento = dōnejeve
municipio = mūsive
democracia = vīdrūsa
dictadura = dohūsōre
política = jōfīlave
político = jōvāro
presidente = gōmu
ministro = kitre
director = tsērōve
parlamentario, congresista, senador, diputado = pārjō, drūvise, senjō, dījō
representante = drūguve
gobernador, intendente, alcalde = gōvneve, intenve, alkanve
policía = jivūse
bomberos = byūmro
capital = jōvate
ciudad = varde
población = jūve
pueblo = jūne
villa = vīlave
obligación = tsugīne
libertad = gūrene
derecho = jōmūne
permiso = drūvēne
prohibición = yūnōve
constitución = jōvānste
ley = yūbe
decreto = dīkūte
norma = jīnve
Economía
economía = Ifināme
consumo = Hūnseme
demanda = Skōmende
compañía = Lefanīe
comercio = Drūvife
mercado = Grītefe
servicio = Vedūse
producto = Sīfute
producción = Vēsūne
transacción = Jūdrase
almacén = Jēfīne
hotel = Telfūe
fábrica = Vōsnīfe
cuenta = Lūnte
boleto = Jōlte
entrada = Vēltī
dinero = Gōne
billete = Gūvele
vuelto, cambio = Kūleve
máquina expendedora = Mūsekēve
precio, tarifa = Vāse
valor = Yūvele
Objetos hechos por el ser
Hogar = Kūme
escritorio = Drīvife
silla = Vūlise
mesa = Deme
cama = Bede
dormitorio = Sūmate
habitación = Rūfte
cuarto = Vūrte
oficina = Sērve
panel = Tōnele
puerta = Fūde
ventana = Gūwe
entrada = Yūvete
hogar = Kūme
casa = Dīrse
apartamento, departamento = Drūfame, Dōvame
edificio = Tūrīne
construcción = Vūsfe
elevador, ascensor = Dūnefe, Dūvūre
escalera = Stūrīe
Herramientas
aparato = Vifūde
cámara = Lūmīre
aguja = Jēde
clavo = Kūdeve
hilo = Hūle
cuerda, cordel, cordón = Rūne
bolsillo = Sūleve
bolso = Gōve
bolsa = Fūse
paraguas = Pānūse
parasol = Pūrise
pantalla = Lānte
pomo = Tōme
llave = Rūte
trancar = Yōnekāne
arma = Sōne
escultura = Dūme
libro = Sūdō
revista = Tūlīse
cuadro = Drūle
grabado = Jāde
electricidad = Nūltī
corriente = Sītrene
base = Bāse
pata = Pūte
conexión = Jōnēse
Ropa
ropa = Kūfe
prenda = Pūrene
manga = Māke
solapa, cuello = Sōkelle
botón = Bōte
cremallera, cierre = Dūjēle
cinturón = Sōtre
zapato = Lūve
gafas = Gūfase
pantalón = Pānte
camisa = Sūme
camiseta = Kūmeīse
zapatilla = Rūfeve
cordones = Sūdeve
abrigo = Sūdōre
chaqueta = Lūnke
calcetines = Sūltēke
bragas, calzón = Rūteke
calzoncillo = Rūtōke
sujetador, sostén = Rūsōve
falda = Fāke
Transportes
transporte= Verīke
tránsito= Sukris
vehículo= Dōluje
tren= Ikranū
subterráneo= Êrshelē
camino= Ferku
vía= Vīa
ruta= Zharute
calle= Kāle
carretera= Tarūtu
autopista= Adpotīsta
avenida= Hāvenda
estación= Tāshun
avión= Avian
aeropuerto= Aviārpuerte
automóvil= Dōluko
bus= Būsu
ambulancia= Ambūlanše
Lenguaje
número = Fōlke
alfabeto = Doravetu
símbolo = Yūrsha
punto = Tundo
coma = Goke
raíz = Rūte
origen = Ôrajan
fuente = Fūnte
papel = Pápele
carta = Léte
comunicación = Sūmnōke
expresión = Sīprehe
voz = Rōs
texto = Tekes
periodismo = Jūrnāsike
periódico = Jūrnāse
diccionario = Vōcabulete
documento = Dōkūmente
informe = Kūntafôme
noticia = Nūteke
computadora = Kōmpūte
idioma extranjero = Xûdome Utsare
Colores
color = Fōlkra
blanco = Hirde
negro = Vūfle
gris = Gōfe
rojo = Hōrje
naranja = Sūrjūse
amarillo = Dārle
verde = Yūble
celeste = Ōnefe
azul = Sōlu
violeta = Rēvūlte
rosa = Hōrse
marrón = Tōlfe
cultura = Skirte
autor = Hōfser
actuación = Vīkdō
espectador = Vōny
espectáculo = Thūvate
entretenimiento = Frekite
arte = Sēnke
cine = Klātīn
dibujo = Fūrke
pintura = Mōlke
música = Klūne
religión = Dīuse
dios = Sēnus
artículo = Srūcte
educación = Skāle
escuela = Thūkele
instituto = Eōlste
colegio = Skoûle
universidad = Ūkiveirsite
clase = Thūlase
curso = Kūrse
estudio = Eōluste
formación = Froïkte
análisis = Lākte
investigación = Ïndāste
conocimiento = Nūtse
idea = Wērfe
información = Ïnfōrmāte
dato = Tēse
forma = Klāske
manera = Rōnne
modo = Mūde
estilo = Stīle
figura = Fīrge
elemento = Ëleme
uso = Frōte
utilización = Ūtīlīzāte
ciencia = Skīnsse
aritmética = Erīdmeïke
historia = Lāstege
geografía = Yōrveke
educación física = Thūkele Fysik
deporte = Skrōkte
carrera = Fēnne
competición = Thūpitīsiōn
ayuda = Ūsfe
favor = Trādfe
apoyo = Sōste
búsqueda = Sōrge
duda = Ðowfe
pregunta = Prōkte
respuesta = Rēspōne
cuestión = Sōnne
solicitud = Sōlīkte
decisión = Ðēsīe
elección = Elēkšion
consejo = Kōnsje
sugerencia = Sūgjeste
orden = Ōrde
control = Kōnte
sistema = Sīsteme
trabajo = Wūrke
empleo = Ēmplee
profesión = Prōfīsīe
esfuerzo = Sfōrke
Números
cero = Zēne
uno = Úlfe
dos = Dúse
tres = Trīke
cuatro = Kūftre
cinco = Sīnke
seis = Sēske
siete = Siete
ocho = Oftre
nueve = Nefve
diez = Dīse
cien, ciento = Siénte
mil = Mīle
millón = Mīlīone
La palabra "cero" (Zēne) es la base, y a partir de ahí se construyen los números siguiendo la secuencia lógica de "uno" (Úlfe), "dos" (Dúse), y así sucesivamente.
Ejemplos:
15 (quince) = Sīnke Úlfe (cinco uno)
42 (cuarenta y dos) = Kūftre Dúse (cuatro dos)
100 (cien) = Siénte
789 (setecientos ochenta y nueve) = Siete Oftre Nefve (siete ochenta nueve)
1,000 (mil) = Mīle
3,456 (tres mil cuatrocientos cincuenta y seis) = Trīke Mīle Kūftre Sīnke Sēske
Espacio y cantidad
lugar = Skantē
posición = Vēsek
movimiento = Dūfan
velocidad = Hūrūd
aceleración = Skaldōōn
dirección = Fūrīk
tamaño = Úšo
largo, longitud = Rūtko
alto, altura = Kālto
ancho = Bórsu
mayoría = Fōrōto
minoría = Sōrgóe
aumento = Vālūke
reducción = Rēsūke
crecimiento = Hūsīke
fondo = Brūto
frente = Frónte
cosa = Tēsu
aspecto = Vīrīl
contenido = Dōkōn
objeto = Trōktu
parte = Fóru
sector = Vēsko
palabra = Skārī
nombre = Nāmū
código = Jīdo
secreto = Flūse
formalidad = Rūtū
presente = Drūne
pasado = Ōlde
futuro = Fūtrū
ocasión = Kōsīōn
vez = Drēj
acción = Gādōn
actividad = Trōvek
acto = Súkto
programa = Plārū
proyecto = Gēktō
obra = Tērīk
acuerdo = Fūvērū
actitud = Hōmū
atención = Fīrsū
capacidad = Skūpat
concepto = Frēskō
tema = Tēkū
condición = Vēndōn
caso = Fūnto
conjunto = Sūrūvō
grupo = Skōkū
creación = Drāyūn
destrucción = Skēsfūr
origen = Rītkō
destino = Tōnkō
objetivo, meta = Blīsū
función = Trēskōn
relación = Drūgū
realidad = Sūkūlū
situación = Kātū
problema = Frāblē
intento = Fūrkō
solución = Vīssōlū
efecto = Trāktō
resultado = Gānsūlt
logro = Flītsō
éxito = Trūxū
fracaso = Blāksō
causa = Dūtū
consecuencia = Skēnsūkō
beneficio = Gūnērū
perjuicio = Skētjūrū
calidad = Skwāltē
tipo = Rūktū
ataque = Tēkkō
defensa = Vīrndōn
paz = Skābū
conflicto = Frēktō
guerra = Rānū
carácter = Trāksō
característica = Vīgū
crisis = Krēssō
cambio = Blānkō
desarrollo = Drōstō
progreso = Prōgū
avance = Vēnsū
retroceso = Blōksō
mejora = Gānsū
deterioro = Skētrū
comienzo, inicio, principio = Drāksū
transcurso = Drūskō
fin, final, cabo = Blātkō
etapa = Gētū
fase = Sūntū
paso = Tāskō
serie = Skēry
secuencia = Sūkwēnsō
grado = Gōrdō
nivel = Frūvēl
proceso = Prūssō
corte = Skōrtū
interrupción = Frērkūp
espera = Tōrū
diferencia = Sūfrērō
similitud = Skēmūlē
sentido = Hērsū
sensación = Gānsēn
vista = Sūgtū
oído = Drīstō
tacto = Gāntū
olfato = Skōlfū
dolor = Flēdō
conciencia = Drūstēns
percepción = Skēpsōn
imagen = Vīgmū
fuerza = Frēnsō
potencia = Vīlgō
presencia = Drēnsū
existencia = Skēstēns
experiencia = Trēspēr
posibilidad = Skōsībūl
probabilidad = Frūbāblē
verdad = Drāktē
mentira = Skērtjū
razón = Sūrūzō
acierto = Drānū
equivocación = Frēkōvū
necesidad = Vēskēsīd
falta = Frūltā
significado = Skīgnīfī
carácter = Tērāktūr
personalidad = Frūgū
pensamiento = Vīntū
memoria = Frīmōrī
recuerdo = Drīkōrdō
deseo = Gāzīū
alegría = Frēdōlū
tristeza = Vīsādō
enojo, enfado = Rāthō
placer, éxtasis = Frīlūrē
empatía = Skēmpātī
interés = Vīntērēs
aburrimiento = Skēbūrmēntō
cansancio = Trānkō
sorpresa = Sūrprēssō
susto = Frēkōn
seguridad = Vīgūrī
confianza = Trūskōnfānzā
miedo, temor = Drēdō
ejemplo = Skējēmplō
Adjetivos
Adjetivos de calidad
santo = Vāte
bueno, buen = Drōlu
malo = Frōndu
superior = Vīkīl
inferior = Skēlū
central = Drēntrū
lateral = Frūntūl
frontal = Vēkīn
trasero, posterior = Drēskō
cierto = Tōrkū
real = Drūskō
falso = Skēntū
mayor = Gāndū
menor = Frīnkūr
importante = Blōntū
necesario = Skēssārū
absoluto = Fūlū
relativo = Frētūvō
caro = Drēvō
barato = Frētkū
viejo = Gōktō
joven = Drēfkū
nuevo = Frēskū
cada = Tīrū
cualquier = Blārkūl
dado = Gōkū
actual = Tīnkū
reciente = Skēntī
capaz = Drīnkū
fácil, simple, sencillo = Vīzū
difícil, complicado = Skōnfū
posible = Trūvō
imposible = Skōmtrūvō
probable = Frūnkō
improbable = Skēmprūnkō
estricto = Skēltrīkū
serio = Vīgūrū
general = Drīvōlū
particular = Trēkūlū
común = Blūmū
especial = Drōskīl
usual = Frūvūkū
único = Skīnglū
raro, extraño = Vīltō
fuerte = Tōrbū
débil = Skēwkū
correcto, acertado = Vīrīt
incorrecto, desacertado = Skērrōnt
contrario, opuesto, inverso = Frēntō
igual = Drēkū
diferente, distinto = Skīstō
parecido, similar = Blēfkūl
otro = Frūtō
diverso = Frēbōsū
manual = Tōnū
automático = Vītūmātīkū
universal = Skēvūrsāl
mundial = Tūrbūl
continental = Skōntīnūntāl
internacional = Frīntērnāsīnāl
nacional = Frūtsīnāl
regional = Rējīōnāl
local = Skōrū
urbano = Blūvānū
rural = Frūrāl
social = Vīrūskō
político = Gūltīkū
cultural = Frītjūrāl
artístico = Vīskīltīkū
propio = Frōpkū
ajeno = Skējīnū
público = Frūblīkū
privado = Frūvādū
Adjetivos de forma
alto = Kālto
bajo = Skūnto
gran = Drēnto
grande = Gāntu
pequeño = Fūltro
amplio = Vrākto
angosto = Skēllū
compacto = Tūnro
delgado = Fīlso
grueso = Gūrrko
Adjetivos sensoriales
caliente = Hīnde
frío = Jōko
ligero = Frēnke
pesado = Gāduke (derivado de “gādu” = peso)
suave = Līssō
firme = Drōste
flexible = Vēnko
duro = Skārko (raíz “skar” da idea de rigidez)
blando = Mēltō
caluroso = Nūhēne (combinación de “nū” = energía, y calor)
fresco = Jūrnēve (raíz similar a “jurna” = nieve)
delicioso, apetitoso = Vēlka
horrible = Krānte
dulce = Sēlve
picante = Fērrke
salado = Drūske (derivado de “drūsa” = sal)
amargo = Skōrne
anterior = Ānoū
posterior = Drēskō
siguiente = Fērkūne (de “seguir” = Thūrne → evolución fonética coherente)
cercano = Cirkū
lejano = Lājū
junto = Nēlve
unido = Sūlkū (similar a adverbios tipo “sōlkō”)
separado = Frēdūn (raíz “frē” = diferencia / división)
alejado = Skāvūne
Adjetivos de sentimientos y sensaciones
feliz
triste
solo
solitario
contento
tranquilo
enojado, enfadado
calmo
agitado
ansioso
interesado
aburrido
encantado
cansado
sorprendido
asustado, atemorizado
doloroso
picante, ardiente
apestoso, maloliente
Adjetivos ordinales
primer, primero, primera
segundo
tercero
cuarto
quinto
décimo
centésimo
millonésimo
penúltimo
último
Adjetivos posesivos
mi = Mō
tu = Tî
su = Zū
nuestro, nuestra = Nātru / Nātra
Verbos auxiliares
ser = Sûra
estar = Êstû
haber = Hāvû
hay = Hē
Existencia
aparecer
desaparecer
existir
cambiar
crecer
vivir
nacer
morir
Movimiento
ir
venir
volver
partir
llegar
llevar
traer
mover
arrojar
lanzar
coger
agarrar
poner
quitar, sacar
alcanzar
acercar
alejar
lanzar
arrojar
lanzar
agarrar
sujetar
golpear
patear
poner
quitar, sacar
alcanzar
acercar
alejar
recoger
levantar
tomar
pegar
Sensaciones
sentir
ver
oír, escuchar
tocar
oler
percibir
Emociones
Amar: Keirô
Querer: Thrīve
Desear: Yōse
Odiar, detestar: Klūde
Entristecerse: Rūske
Llorar: Yerne
Reír: Skairū
Enojarse, enfadarse: Dūske
Admirar, alabar, elogiar: Hāske
Alegrarse: Yārne
Encantarse: Kīrne
Consolar: Sōrne
Interesarse: Tōrne
Aburrirse: Zīrne
Cansarse: Fōrne
Sorprenderse: Dlūrne
Asustarse, atemorizarse: Kūrne
Actividades
Tolerar: Dlōske
Proteger: Sōdke
Matar: Kôlna
Comunicarse: Jûbele
Afirmar: Stôneve
Negar: Riflêje
Decir: Lôr
Hablar: Skūme
Callar: Dernê
Escribir: Trēve
Leer: Yôrne
Analizar: Wôkteve
Pensar: Seōpe
Cantar: Vryūfe
Señalar: Zūrne
Apuñalar: Sykūna
Morder: Thrōne
Clavar: Dlīve
Comer: Jufle
Beber: Rōne
Acordar: Vīgne
Afectar: Fākle
Generar: Grōfve
Añadir, agregar: Vīske
Mejorar: Seflūre
Empeorar: Drōnte
Seguir: Thūrne
Avanzar: Fylūte
Retroceder: Virneō
Ayudar: Oīle
Complicar: Vēgnele
Reunirse: Sûfkle
Entrevistar: Tôneve
Abrir, desenvolver: Rōske
Jugar: Jūgele
Tener: Vēde
Faltar: Drēne
Dar: Yūfe
Recibir: Stūrne
Romper: Frônte
Doblar: Skūne
Cortar: Sīkle
Comprar: Vēske
Vender: Lūrne
Llevar puesto: Zōske
Cambiar: Thyrne
Intercambiar: Dākle
Sustituir, reemplazar: Hōske
Cerrar: Klēske
Buscar: Jīrne
Encontrar: Fērne
Obtener, conseguir: Grūnde
Crear: Lēve
Creer: Sēne
Comenzar, iniciar, empezar: Kārne
Terminar, acabar: Klūse
Abandonar: Rōneve
Dejar: Skērve
Entrar: Vōrne
Quedarse: Dūske
Salir: Vārne
Atender: Zūrne
Medir: Yōne
Pesar: Sērne
Considerar: Hākle
Comparar: Thūske
Evaluar: Tūrkle
Decidir: Līrne
Construir: Wērve
Destruir: Klōrne
Deber: Hīkle
Poder: Fērne
Conocer: Sērne
Entender, comprender: Tērve
Atar: Lōrne
Saber: Thōske
Trabajar: Wākle
Separar, dividir, partir: Yūrne
Descansar: Sōrne
Dormir: Vūrne
Despertar: Stīrne
Aceptar: Zārne
Rechazar: Rīkle
Descartar: Klōske
Acompañar: Skīrne
Pedir, solicitar: Yārne
Pretender: Trērne
Proponer: Sīkle
Sugerir: Hīske
Usar, utilizar: Yūske
Hacer: Tīrne
Fabricar: Dōrne
Arreglar, reparar: Vārne
Explicar: Dīrne
Mostrar: Zūrne
Tratar: Thīrve
Evitar: Stūrne
Probar, intentar: Yūrne
Comprobar, verificar: Thērne
Variar: Sūrne
Esperar: Klērve
Necesitar, precisar: Vīrne
Significar: Stārne
Parecer: Yārne
Distinguir: Hūrne
Adverbios
Adverbios de cantidad
más = Dāmō
menos = Zūnū
muy = Drī
mucho = Stūrū
poco = Tōku
apenas = Trūssū
algo = Sūlkō
casi = Quātī
aproximadamente = Fōrīsūk
exactamente = Tūrū
bastante = Dūrītū
justo = Frānkū
demasiado = Vāstū
etcétera = Êtsek
solo, solamente = Ōnlu
tan = Sū
tanto = Brīn
todo = Êvru
nada = Nūth
cómo = Hū
cuándo = Kvān
cuánto = Kvāntū
cuál, cuáles = Kēr, Kērz
dónde = Wēr
Adverbios de calidad en Shalldare
bien = Vod
mal = Fūl
mejor = Ōlke
peor = Þōre
regular = Lōmû
despacio = Hāzú
deprisa = Ūskē
tal = Oô
como = Sōūke
adrede = Ôðu
claro = Nūki
exacto = Sīrko
obvio = Fōbu
inclusive = Sōrkuþ
además = Êdūru
asimismo = Jāþō
únicamente = Úfaðo
especialmente = Zārûf
incluso = Ufað
viceversa = Vīsevūs
siquiera = Dikū
inicialmente = Sītuþ
finalmente = Fīnūto
Adverbios de posibilidad
siempre = Vúaye
nunca = Sūkeve
jamás = Nājūre
también = Sōvú
tampoco = Tōnūve
quizá, quizás = Gēka
acaso = Sūðū
fácilmente = Kīsīdū
difícilmente = Rūlītū
probablemente = Gōkūnu
posiblemente = Kūnōve
seguramente = Sūgevō
Adverbios temporales
antes = Ānoū
anteriormente = Vītuvo
actualmente = Cākve
ahora = Tīnū
enseguida = Sōrēvi
inmediatamente = Aðūjūnu
ya = Kyō
todavía = Yūnū
aún = Drīnu
recién = Gōlu
mientras = Tādō
después = Fīru
luego = Lūdu
pronto = Yūvū
tarde = Sūke
temprano = Vāri
ayer = Iðō
anoche = Sūtā
hoy = Tōgū
mañana = Zāfu
de nuevo = Dōlve
próximamente = Kīnūvu
Adverbios de ubicación
arriba, encima= Ufu
abajo, debajo= Ēru
adelante, delante= Adlū
atrás, detrás= Atī
centro, medio= Cēnu
alrededor= Elētū
enfrente= Enfūt
cerca= Cirkū
lejos= Lājū
adentro, dentro= Adufū
afuera, fuera= Afūtu
aquí= Ātik
acá= Āk
ahí= Āhī
allá= Ālā
allí= Ātī
Otros Adverbios
así = Dāvu
adónde = Tyuōn
dónde = Kāme
Preposiciones
a, al= Jaro
ante= Dranu
bajo= Gūva
con= Kyen
contra= Fōru
de, del= Ovī
desde= Plīse
durante= Dūvar
en= Nē
entre= Isye
hacia= Jātū
hasta= Ōnta
mediante= Yevū
para= Sōri
por= Kōr
según= Pefyū
sin= Nir
sobre= Uwēr
tras= Aftrū
Conjunciones:
aunque= Ókke
como= Esoe
cuando= Kūnde
entonces= Ōenke
excepto= Ekzēptu
ni= Nai
o= Oū
pero= Purū
porque= Pōrkei
pues= Pūs
que= Ku
salvo= Saluvō
si= Siō
sino= Sinū
y= Ē
Pronombres:
yo= Ā
tú= Ti
usted= Usir
él, ella, ello= Iēl
nosotros, nosotras= Nōstrū
ustedes= Ussēr
ellos, ellas= Ēllū
mí, conmigo= Mīkūn
ti, contigo= Tikūn
sí, consigo= Sīkūn
me= Mī
te= Ti
le, la, lo= Lī
se= Sī
nos= Nōs
mío, mía= Mīō, Mīā
tuyo, tuya= Tīō, Tīā
suyo, suya= Sīō, Sīā
nuestro, nuestra= Nōstrō, Nōstrā
cuyo, cuya= Kūyō, Kūyā
Pronombres indefinidos:
un, una, uno= Tār, Tūrī, Tō
algún, alguna, algo= Fūr, Fūrā, Fōlk
ninguno, ninguna, nada= Nēn, Nēnā, Nād
varios, varias= Vīrd, Vīrdā, Vārē
otro, otra= Sēk, Sēkā
mismo, misma= Drū, Drūsā
tan, tanto, tanta= Tū, Tūnk, Tūntā
alguien= Skē, Skīn
nadie= Frūn, Frūnā
cualquiera= Kōlk, Kōlkā
ambos= Tūmb, Tūmbā
Pronombres interrogativos:
cuál= Klī
cuánto= Klūnt
quién= Skīn
qué= Skō
Demostrativos:
este, esta, esto= Tīr, Tīrā, Tōs
estos, estas= Tīrād, Tīrādā
ese, esa, eso= Sū, Sūnā, Sōs
esos, esas= Sūnd, Sūndā
aquel, aquella, aquello= Drūk, Drūkā, Drōs
aquellos, aquellas= Drūkād, Drūkādā
Interjecciones:
Sí= Fē
No= Nē
Hola= Hūr
Adiós= Sāl
Es= Iks
Locuciones:
gracias= Sālur
acerca de= Ākirda
a lo mejor= En Māk
a menudo= En Kefū
a pesar de= En Sūnā
a propósito= En Pūrfesā
a través de= Ātūrv
dado que= Dōkeir
es decir= Iks Kasir
ni siquiera= Fi Dipgere
o sea= U Di
por cierto= Sur Servu
por ejemplo= Sur Aoatsku
por favor= Sur Segur
por tanto= Sur Vefvu
sin embargo= Di Atrerru
tal vez= Vek Gat
ya que= Oe Pga
Sexualidad
Homosexual
Heterosexual
Pansexual
Asexual
Bisexual
Gay
Lesbiana
Femboy
Tomboy
La comida desempeña un papel esencial en la vida de los Shalldare. Aunque son guerreros formidables, también son conocidos por su capacidad para apreciar y disfrutar de los placeres culinarios. Su dieta se basa principalmente en alimentos ricos en proteínas, como carnes y pescados, pero también incluye una amplia variedad de frutas, verduras y granos que cultivan en sus tierras fértiles. Algunos de los platos más destacados de la cocina Shalldare son el "Estofado de Carne de Águila", donde la carne tierna y sabrosa del ave es cocinada a fuego lento con hierbas y especias aromáticas, y el "Pez Gélido", un pescado de aguas profundas que se sirve crudo en rodajas finas y se acompaña con salsas picantes y encurtidos.
En cuanto a las tradiciones, los Shalldare tienen una fuerte conexión con la naturaleza y valoran profundamente la tierra que habitan. Celebran rituales en honor a los elementos y los dioses de su religión que son Gade y Tasár, especialmente durante los cambios estacionales y los ciclos lunares. Uno de los eventos más significativos es el "Festival de las Estrellas", que se celebra una vez al año en una noche clara y estrellada. Durante esta festividad, los Shalldare se reúnen en grandes grupos para admirar el cielo nocturno, realizando danzas sagradas y cantos en honor a sus dioses. Es un momento de comunión y reflexión, donde se reconoce la belleza del universo y la importancia de la paz en contraste con el caos de la batalla.
La filosofía Shalldare se centra en el concepto de equilibrio entre la fuerza y la sabiduría. Aunque son conocidos por su destreza en el combate y ser implacables y brutales, también valoran el conocimiento y la búsqueda de la armonía interior. Los Shalldare filósofos, como el renombrado pensador Xalthor, han reflexionado sobre el propósito de la existencia y la naturaleza del universo. Sus escritos y enseñanzas, recopilados en el libro sagrado llamado "Las Palabras de la Balanza", exploran temas como el autocontrol, la meditación y la conexión espiritual con el mundo que los rodea.
En el ámbito de la literatura, los Shalldare son reconocidos por sus épicas historias de valor y heroísmo en la batalla. El poeta más venerado de la cultura Shalldare, Rhalan, ha dejado un legado duradero con sus poemas épicos que narran las gestas de los guerreros más valientes y los momentos clave de la historia Shalldare. Sus versos cargados de emoción y pasión han cautivado a generaciones de lectores y se han convertido en una fuente de inspiración para los jóvenes guerreros.
En cuanto a las relaciones amorosas, los Shalldare valoran la lealtad y el compromiso. El matrimonio es considerado un vínculo sagrado y duradero entre dos individuos, y los Shalldare ven a aquellos que han perdido a sus cónyuges como ejemplos de fortaleza y resiliencia. Las viudas y los viudos son honrados dentro de la sociedad y se les da apoyo emocional y comunitario. Sin embargo, es importante destacar que la fidelidad es un valor fundamental en la cultura Shalldare, y aquellos que cometen adulterio son vistos como traidores y se enfrentan a graves consecuencias sociales y, en algunos casos extremos, pueden ser asesinados.
Dentro de la sociedad Shalldare, se considera que los infieles y aquellos que han matado a un hijo propio o pareja han cometido actos que trascienden los límites morales aceptables. Estas transgresiones se ven como una violación profunda de los valores y principios fundamentales de la sociedad Shalldare, como la lealtad y la protección de los seres queridos. Como resultado, se han establecido rituales específicos para tratar con estos individuos.
Uno de los rituales más conocidos es el juicio y la ejecución de los infieles. Cuando se descubre una infidelidad en una pareja Shalldare, se lleva a cabo un juicio para evaluar la evidencia y determinar la culpabilidad. En caso de que se encuentre al acusado culpable, se realiza una ejecución pública como un acto de justicia y para servir como advertencia a otros que puedan considerar acciones similares. Aunque puede parecer extremo, desde la perspectiva Shalldare, este acto tiene como objetivo mantener la integridad de la institución del matrimonio y preservar la confianza y la lealtad dentro de la comunidad.
En el caso de aquellos que han matado a un hijo propio o pareja, los rituales de muerte pueden variar. Algunas versiones de estos rituales involucran la participación de los miembros afectados por el crimen. Por ejemplo, los familiares sobrevivientes pueden tener la opción de llevar a cabo una especie de "venganza ritualizada" como una forma de liberar su dolor y buscar un sentido de justicia. Esto puede implicar una confrontación física o algún tipo de simbolismo ritualizado que permita a los afectados encontrar un cierre emocional.
Dichos y Modismos:
"Como las estrellas en el Festival": Significa algo hermoso y deslumbrante, haciendo referencia al "Festival de las Estrellas" de los Shalldare.
"Bajo el manto de Gade": Usado para describir una situación peligrosa o destructiva.
"Tan sabio como un Shalldare": Alaba a alguien por su sabiduría y conocimiento.
"Como un Shalldare en batalla": Significa que alguien está listo para enfrentar un desafío o una situación complicada.
"Equilibrio Shalldare": Hace referencia a la idea del equilibrio entre la fuerza y la sabiduría, y se usa cuando se busca armonía en una situación.
Groserías:
"Como un cobarde de las sombras" - Un insulto que implica que alguien es débil o miedoso.
"Maldición de Gade" - Usado cuando alguien está enojado o frustrado.
"Como un tonto sin honor" - Desprecia a alguien por su falta de integridad.
"Tan inútil como un arma sin filo" - Se usa para señalar la ineptitud de alguien.
"Tasár no te protegerá" - Un insulto que sugiere que alguien no tiene esperanza o ayuda.
Vestimenta Tradicional Shalldare:
La vestimenta tradicional de los Shalldare es un reflejo de su conexión profunda con la naturaleza, su filosofía de equilibrio entre la fuerza y la sabiduría, y su reverencia por los dioses Tasar y Gade. Cada pieza de ropa y accesorio tiene un significado especial y forma parte integral de la identidad cultural de esta raza guerrera.
Vestimenta Masculina:
Los hombres Shalldare visten con orgullo una combinación de prendas que reflejan su valentía y espíritu guerrero. Visten pantalones amplios de tela resistente, asegurados con cinturones de cuero decorados con símbolos y grabados que representan a sus dioses y la naturaleza. En la parte superior, llevan hombreras de metal sólido que protegen sus hombros y parte superior del torso, pero dejan sus pechos totalmente descubiertos. La característica más distintiva de su vestimenta es el uso de cubrebocas de hierro, amarrados con correas de cuero que rodean su cabeza. Estos cubrebocas no solo tienen un propósito práctico en la batalla, sino que también simbolizan su capacidad para resistir adversidades y proteger su identidad espiritual. Los hombres Shalldare también llevan protectores en los brazos, que simbolizan su habilidad para manejar las armas con destreza.
Vestimenta Femenina:
Las mujeres Shalldare, conocidas por su belleza y fuerza, visten túnicas largas y fluidas en colores vibrantes que acentúan su figura. Sus túnicas están decoradas con intrincados bordados y patrones que representan la flora y fauna de su planeta. A diferencia de los hombres, las mujeres Shalldare no usan hombreras, permitiendo que sus pechos queden expuestos al aire. Esta elección no solo es un acto de devoción a sus dioses, sino que también representa su conexión directa con la tierra y su deseo de que Tasar y Gade sientan sus corazones. Las mujeres Shalldare llevan cabello largo y suelto, adornado con joyas y plumas que reflejan su conexión con la naturaleza, también portan los emblemáticos cubrebocas de hierro.
Vestimenta Infantil:
Los niños Shalldare visten ropas más simples y ligeras, permitiendo libertad de movimiento mientras crecen y aprenden las tradiciones de su cultura. A medida que maduran, adoptan gradualmente las prendas y accesorios más emblemáticos de su sociedad.
Jerarquías de Vestimenta:
La vestimenta en la sociedad Shalldare no está determinada por jerarquías rígidas, sino por elecciones personales y logros individuales. Los guerreros que han sobrevivido a batallas difíciles pueden ganar el derecho de llevar pecheras como símbolo de su valentía y resistencia. Sin embargo, esto no se considera un signo de superioridad, sino más bien un honor otorgado por los dioses.
La vestimenta tradicional Shalldare es un testimonio visual de su conexión con la tierra, su búsqueda de equilibrio y su devoción a los dioses. Cada prenda y accesorio tiene un propósito y un significado profundo, y juntos forman un conjunto único que refleja la identidad y los valores de esta raza guerrera.
La cultura de los seguidores de la raza Shalldare, conocidos como Shalldareanos, se ha convertido en una fuerza resiliente y dedicada que busca preservar las tradiciones y los valores de los Shalldare. Estos individuos, provenientes de diversas especies, han abrazado el arte de la guerra Shalldare y se han convertido en expertos en su dominio. Visten armaduras de cuerpo completo adornadas con símbolos religiosos y emblemas que representan su lealtad y compromiso.
Una de las características destacables de los Shalldareanos es su dedicación a preservar las tradiciones culinarias de los Shalldare. Han adoptado platos emblemáticos de la cultura Shalldare y los han integrado en su propio repertorio culinario. Entre los ejemplos se encuentran el "Kur'mak", un estofado de carne sazonado con hierbas y especias, y el "Rashka", un plato de pescado ahumado acompañado de algas marinas. Estas comidas representan la fuerza y la resistencia que caracterizan a los Shalldareanos, y se han convertido en símbolos de su identidad culinaria.
En cuanto a las tradiciones, los Shalldareanos han adoptado rituales que reflejan su compromiso con la defensa y la lealtad. Realizan ceremonias de iniciación en las que los nuevos miembros son sometidos a pruebas de resistencia y valentía. Estos rituales incluyen pruebas físicas y mentales que buscan fortalecer el espíritu de los Shalldareanos y forjar vínculos entre ellos. Además, celebran festivales anuales en honor a los dioses Shalldare, donde se llevan a cabo exhibiciones de habilidades marciales, competencias de tiro con arco y demostraciones de combate.
La filosofía de los Shalldareanos se basa en el honor, la lealtad y la disciplina. Siguen los principios éticos y morales establecidos en las Siete Reglas del Shalldare, que rigen su comportamiento y su forma de interactuar con los demás. La honestidad, la protección de los seres queridos y el respeto por la vida son valores fundamentales en su cosmovisión. Los Shalldareanos también han desarrollado su propia filosofía marcial, inspirada en las enseñanzas de antiguos guerreros y sabios, que busca encontrar un equilibrio entre la fuerza y la sabiduría.
Dentro de la cultura Shalldareana, las artes marciales ocupan un lugar de gran importancia. Los Shalldareanos han perfeccionado un estilo distintivo de combate que refleja su filosofía de vida y sus valores fundamentales. Estas artes marciales son conocidas como el Arte de la Guerra Shalldareana y se transmiten de generación en generación como un tesoro cultural invaluable.
El Arte de la Guerra Shalldareana se caracteriza por combinar movimientos fluidos y elegantes con técnicas letales y precisas. Los Shalldareanos creen en la importancia de la disciplina y el control en el combate, buscando mantener un equilibrio entre la fuerza bruta y la astucia estratégica. A través de una combinación de golpes rápidos, bloqueos certeros y movimientos evasivos, los Shalldareanos son capaces de enfrentar a sus oponentes con habilidad y destreza.
Estas artes marciales también hacen uso de armas tradicionales, como espadas curvas, lanzas y arcos. Los Shalldareanos dominan el manejo de estas armas con una maestría incomparable, convirtiéndose en verdaderos expertos en el arte de la guerra. Cada arma tiene su propia técnica y estilo de combate asociado, y los Shalldareanos conocen a la perfección las fortalezas y debilidades de cada una.
La formación en el Arte de la Guerra Shalldare comienza desde temprana edad. Los jóvenes Shalldareanos son instruidos en las técnicas básicas de combate y se les enseña a cultivar la disciplina y el respeto por su arte. A medida que avanzan en su entrenamiento, se les introduce en técnicas más avanzadas y se les anima a desarrollar su propio estilo personal.
Las obras literarias de los Shalldareanos también desempeñan un papel importante en la difusión y preservación de las artes marciales. Las gestas y hazañas de los guerreros más destacados son narradas en epopeyas y poemas épicos. Estas historias transmiten los valores fundamentales de valentía, sacrificio y honor, y se consideran auténticos tesoros culturales. Los Shalldareanos encuentran inspiración en estas narraciones, y las utilizan como fuente de motivación y guía en su propio camino marcial.
Además de las artes marciales, los Shalldareanos también han desarrollado otras formas de expresión artística relacionadas con la guerra. La pintura de batallas es una forma de arte muy apreciada, en la que se representan escenas de combate y momentos destacados de la historia Shalldareana. Estas pinturas capturan la intensidad y la emoción de la guerra, y se consideran una forma de honrar a los valientes guerreros caídos en batalla.
En cuanto a las relaciones amorosas, los Shalldareanos valoran la fortaleza y la lealtad en sus parejas. Consideran que aquellos que han superado tragedias y dificultades en sus vidas son ejemplos de resiliencia y valentía, y por lo tanto, son altamente respetados. Las viudas y los viudos, que han perdido a sus parejas en la batalla, son considerados como personas de gran fortaleza emocional y se les rinde homenaje en ceremonias especiales. Estos individuos son admirados por su capacidad de enfrentar la pérdida y seguir adelante, y se les otorga un estatus especial dentro de la comunidad Shalldareana.
Vestimenta Tradicional Shalldareana:
La vestimenta tradicional de los Shalldareanos refleja su devoción a las tradiciones de los Shalldare y su compromiso con el arte de la guerra, esta vestimenta es un homenaje a la fuerza, la valentía y la lealtad que caracterizan a esta comunidad.
Vestimenta Masculina:
Los Shalldareanos visten imponentes armaduras de cuerpo completo hechas de materiales resistentes y duraderos. Las armaduras son adaptables al espacio exterior y están diseñadas para proporcionar protección en combate y en condiciones extremas. Las armaduras son de tonos oscuros, predominantemente en gris y negro, y están adornadas con símbolos religiosos y emblemas que representan la lealtad a los dioses y a la causa Shalldareana. Los Shalldareanos también usan cascos ornamentados con cuernos y detalles grabados que evocan la imagen de sus antepasados guerreros.
Vestimenta Femenina:
Las Shalldareanas adoptan una versión igualmente impresionante de la armadura, que ha sido diseñada para adaptarse a la anatomía femenina sin comprometer la funcionalidad ni la protección. Las armaduras femeninas también llevan símbolos y emblemas de devoción, y los cascos están decorados con detalles elegantes y ornamentados.
Vestimenta Infantil:
Los jóvenes Shalldareanos usan versiones más ligeras y simplificadas de las armaduras tradicionales, permitiéndoles moverse y aprender las técnicas de combate con comodidad. Estas versiones infantiles también están decoradas con símbolos y emblemas, inculcando desde una edad temprana la importancia de la lealtad y la disciplina.
Jerarquías de Vestimenta:
En la comunidad Shalldareana, no existen jerarquías de vestimenta estrictas. Sin embargo, a medida que los individuos avanzan en su entrenamiento y demuestran su valía en el arte de la guerra, pueden ser honrados con insignias, adornos y detalles especiales en sus armaduras como símbolo de su progreso y logros. Estos elementos son reconocimientos del compromiso y la habilidad de cada Shalldareano en su búsqueda de la maestría en la guerra y la defensa de su cultura.